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Trabajos de restauración del mosaico de Veranes.
Un juzgado deberá fallar si hubo «trato privilegiado» en la obra del mosaico de Veranes

Un juzgado deberá fallar si hubo «trato privilegiado» en la obra del mosaico de Veranes

El empresario gijonés Luis García Muñiz formaliza el contencioso al creer que existe una «inequívoca relación» entre el autor del proyecto y la adjudicataria

ANDRÉS PRESEDO

Lunes, 15 de diciembre 2014, 00:49

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La obra está concluida, pero sus consecuencias acabarán en los tribunales. Se trata de la restauración de los mosaicos de la villa romana de Veranes, que el Ayuntamiento de Gijón sacó a concurso por 198.438 euros (aunque luego tuvo una baja del orden del 40%) y que se llevó la empresa gallega Terra Arqueos. Esta adjudicación, a entender de otra empresa contendiente, la que quedó en segundo lugar, se llevó a cabo de forma irregular, con un «evidente trato privilegiado», que se centra en que la elaboración del proyecto fue realizada por Miguel Ángel López Marcos, «que lleva trabajando para Terra Arqueos los últimos veinte años». Por ello, a entender del demandante, es evidente que existió una información privilegiada para aquella empresa, además de estar adaptadas las condiciones del concurso a las condiciones de la misma.

Estos argumentos utiliza el empresario gijonés Luis García Muñiz en la demanda presentada contra el Ayuntamiento de Gijón y que fue formalizada el pasado martes ante el Juzgado de lo Contencioso Administrativo número 1 de Gijón. Pero es que el demandante recuerda, además, el «nefasto resultado» de la primera restauración de los mosaicos de Veranes, realizada entre los años 2005 y 2007 también por la empresa Terra Arqueos.

En relación con la presunta relación del autor del proyecto con la empresa adjudicataria, el demandante aporta abundante documentación que, a su entender, así lo atestigua de forma inequívoca. De hecho, menciona que en la propia página web de Terra Arqueos se afirma que Miguel Ángel López Marcos «ha dirigido un total de 18 de las 42 restauraciones allí referidas», y que el propio protagonista reconoce en múltiples declaraciones públicas que «pertenece a la empresa Terra Arqueos S. L.» o que «forma parte» de la misma. En estas condiciones, Luis García Muñiz asegura que la empresa gallega «debería de haber sido excluida de la licitación». En Gijón, Miguel Ángel López Marcos y Terra Arqueos ya trabajaron conjuntamente en el año 2008 en la Campa de Torres, en 2009 en las Termas Romanas y en 2010 en la muralla.

La empresa lo niega

La mesa de contratación era conocedora de esta situación, por lo que requirió explicaciones a Terra Arqueos. La empresa gallega aseguró que el autor del proyecto no tenía «vinculación alguna» con la citada sociedad, argumento que fue dado por bueno y se procedió a adjudicar la restauración a Terra Arqueos. Luis García Muñiz, sin embargo, entiende que el vínculo entre el autor del proyecto y la empresa adjudicataria es palmario y aporta abundante documentación que así lo atestigua. Entre la misma, unas declaraciones del propio Miguel Ángel López Marcos, con motivo de unos trabajos suyos en Egipto, donde textualmente asegura que «pertenece» a la empresa Terra Arqueos. Por todo ello, y aunque la obra ya esté concluida, Luis García Muñiz entiende que deberá de ser el juzgado quien valore y aclare esta situación, que él entiende que fue de un evidente «trato privilegiado» hacia una empresa en perjuicio de las otras contendientes en el concurso. El pasado martes fue formalizado el contencioso administrativo que, de ser favorable al demandante, provocará la lógica indemnización por daños y perjuicios.

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