Borrar
Compañeros del trabajador fallecido el miércoles mientras reparaba una grúa, concentrados a las puertas del astillero Armón para exigir que se incrementen las medidas de seguridad laborales.
La plantilla de Armón paraliza la actividad tras el accidente mortal de un operario

La plantilla de Armón paraliza la actividad tras el accidente mortal de un operario

Los trabajadores del astillero mantuvieron una concentración. La empresa acepta que los sindicatos entren en la investigación

Olaya Suárez

Viernes, 30 de enero 2015, 00:44

Necesitas ser suscriptor para acceder a esta funcionalidad.

Compartir

La imagen sobrecogía. Más de un centenar de empleados de Armón y sus subcontratas, experimentados operarios muchos de ellos, guardando un minuto de silencio antes del amanecer en recuerdo al último compañero fallecido en accidente laboral. El tercero en menos de 18 meses. «No aguantamos más, nos da miedo venir a trabajar. El siguiente puede ser cualquiera...», comentaban durante la concentración a las puertas de las instalaciones de El Natahoyo. Unas puertas que no cruzaron, ya que, al igual que hicieron el pasado mes de mayo tras el último siniestro mortal, decidieron realizar un parón de la actividad durante una jornada como señal de duelo y repulsa.

El cadáver de Jorge Díaz González, de 50 años, casado, sin hijos y vecino de Montevil, fue velado por sus familiares en el tanatorio de Cabueñes durante todo el día de ayer. La familia aguarda los resultados de la investigación sobre las causas que provocaron la muerte del operario mientras reparaba una grúa, para determinar si emprenden medidas legales y depurar de esta forma responsabilidades. Díaz trabajaba desde hacía años para la empresa Fuyro, dedicada al mantenimiento de elevadores. Su funeral se celebrará hoy a las cinco en el tanatorio.

La dirección de los astilleros de Armón aceptó, desde la primera reunión de urgencia mantenida con los trabajadores media hora después del accidente, que los sindicatos participen en la investigación. Una vez que los restos mortales fueron evacuados por los bomberos desde el brazo de la grúa, los agentes de la Brigada de Policía Científica y de la Policía Judicial inspeccionaron minuciosamente el terreno y el lugar en el que se produjo el siniestro para tratar de determinar las causas exactas que lo provocaron. En las investigaciones también interviene la Inspección de Trabajo. Todos los informes, incluido el de la autopsia que le practicaron en el Instituto Anatómico Forense de Oviedo, serán remitidos al juzgado que se encontraba realizando las funciones de guardia el miércoles.

Según los primeros datos con los que trabajan los sindicatos, «el accidente se produjo cuando los dos operarios, que estaban trabajando con las medidas de seguridad necesarias, se disponían a cambiar un cable de una grúa que presentaba una serie de desperfectos», relató el secretario de Política Industrial de CCOO, Manuel Pérez Uría. Añadió que «la hipótesis que se maneja es que un gancho pudo golpear la jaula en la que se encontraban los dos operarios y esta, a su vez, chocó contra la estructura de la grúa». Uno de los empleados sufrió magulladuras, mientras que el segundo pudo haber sido alcanzado en la cabeza por el cable. Murió en el acto.

Durante la concentración de ayer, los trabajadores del astillero trasladaron a los representantes de los sindicatos allí presentes que «la empresa está respetando el protocolo pactado hace un año después de los dos últimos accidentes mortales registrados y que la condiciones de seguridad en el astillero están mejorando». «Hay que ser cautos hasta saber las causas del accidente y una vez que se sepan, exigir responsabilidades», subrayó Pérez Uría.

Es el tercer fallecido en 18 meses. El pasado mayo moría Agustín Garrido, de 30 años mientras trabajaba en el interior de un tanque. En julio de 2013 perdió la vida el buzo leonés Fernando Robles Aller, de 42 años, que realizaba labores de limpieza de fondos del dique.

Reporta un error en esta noticia

* Campos obligatorios