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Manuel Pecharromán, en las escaleras de acceso a la planta noble del Ayuntamiento.
«No cambiaré de chaqueta, pero el partido necesita una transformación profunda»

«No cambiaré de chaqueta, pero el partido necesita una transformación profunda»

Manuel Pecharromán Portavoz del grupo municipal del PP

IVÁN VILLAR

Domingo, 26 de abril 2015, 01:02

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No es la salida soñada. Después de doce años, Manuel Pecharromán encara la recta final de su carrera como concejal. Cuando pasen las elecciones deberá dejar el Ayuntamiento tras un mandato en el que tuvo que asumir por sorpresa el liderazgo de un grupo que desde hace siete meses ha roto toda relación con su partido.

¿Le habría gustado continuar?

Sin duda. Ser concejal de Gijón es una de las etapas más importantes de mi vida. Me gustaría agradecérselo a miles de personas y colectivos que nos han apoyado este tiempo.

¿Cuándo fue la última vez que habló con Mercedes Fernández?

Antes del congreso de octubre.

¿Y en qué términos?

Hablamos de la necesidad de generar un amplio consenso para el congreso. Lamentablemente el resultado fue todo lo contrario. El grupo municipal hizo lo posible por negociar una buena salida para el partido, pero no lo conseguimos.

Vayamos al inicio de esta crisis. ¿Por qué en 2011 el PP tuvo en Gijón su mayor batacazo electoral?

Cuando este equipo llegó en 2003, aunque las encuestas pronosticaban bajar de 9 a 5 concejales subimos a 11. Luego le quitamos la mayoría absoluta al PSOE, con 12. Pero cuando estábamos a punto de llegar a 14, surgió Foro. A nadie se le escapa que en Gijón tuvo más fuerza. La mayoría de los líderes de Foro proceden de aquí: Cascos, Oblanca, Landa... Y se notó en zonas como Somió o el centro, donde hasta entonces ganaba el PP.

¿Se acertó al apoyar la investidura de Carmen Moriyón?

Creo que fuimos valientes. Después de 30 años de gobiernos de izquierda había un aire viciado en el Ayuntamiento y hemos contribuido a que entrara aire nuevo.

Mercedes Fernández dice que se debió entrar en el gobierno...

Era lo que más nos habría gustado. También a mí. Somos un partido de gobierno y se habría visto la diferencia de gestión con respecto a la gente sin experiencia de Foro. Pero la dirección nacional entendió que no debía hacerse. Génova llamó y nos permitió facilitar ese gobierno, pero no entrar en él. Y así se explicó en una junta local en la que estaba Fernando Goñi.

¿Sirvió para algo ese apoyo a Foro?

Hemos contribuido a reducir el entramado de la administración y a sanear las empresas municipales. También insistimos mucho, pese a que solo lo logramos parcialmente, en la reducción de trabas municipales, la agilización de licencias, la creación de más planes de dinamización... E intentamos reducir los impuestos. Pero la contribución más importante fue darle estabilidad al Ayuntamiento.

No obstante en una ocasión se barajó la moción de censura...

A Foro en algún momento le costó entender que gobernaba en minoría y se declaró en rebeldía ante el Pleno, como con la ordenanza de fachadas. Pero siempre dijimos que no facilitaríamos la vuelta de un alcalde del PSOE.

¿Foro cumplió los compromisos adquiridos con el PP?

No. Incumplió muchísimos. Muchas cuestiones se han quedado a medias.

Aún así, les acaban de apoyar en una modificación de 26 millones...

Porque permite que haya dinero para las fachadas, muy importante para un sector ahogado como es la construcción, para invertir en los colegios y para construir un edificio para que nuevas empresas se asienten en el Parque Tecnológico. Si Foro incumple ese acuerdo, será responsabilidad suya.

La marcha de Fernández Pardo

¿Por qué no siguió los pasos de Pilar Fernández Pardo tras la imposición de la gestora en Gijón?

Había quien entendía que debíamos dimitir todos. Pero también quienes pensábamos que las cosas había que seguir luchándolas desde dentro. Y aunque no estábamos de acuerdo con ella, la gestora había sido autorizada por el PP nacional. Intentamos hacer tábula rasa de todo lo sucedido para que el partido viviera una nueva etapa y se acabaran las guerras internas. Lamentablemente el partido no se ha fortalecido, sino todo lo contrario.

¿Cómo fue la relación con la gestora?

Nosotros intentamos colaborar, porque era legítima. Aunque se alargó demasiado y denunciamos que superara los seis meses de su mandato. Pasado un tiempo vimos con extrañeza cómo aterrizaron personas como Isabel Casielles, Pablo González y Manolo del Castillo, que empezaron a organizar la sede y el congreso.

Diego Comins habló de una 'gestora de la gestora'...

Es así. Nosotros teníamos relación diaria con Ángeles Fernández-Ahúja y Diego Comins, con quienes nos coordinábamos. Pero quienes mandaban en la sede eran otros. Era un absurdo dentro del absurdo que fue aprobar la gestora. Se dedicaron a afiliar a gente que no se sabe de dónde venía. Hubo 200 o 300 altas que llegaban en algunos casos en sobres anónimos. Y ahora algunas de esas personas que no se sabe cómo llegaron son las que encabezan nuestra lista electoral.

¿Por qué se rompió toda relación tras el congreso de octubre?

Hasta entonces intentamos llegar a algún acuerdo, pero el partido optó por un pucherazo. No se ha acertado y en Gijón el partido lleva desde 2009 sin un congreso democrático.

¿Se sienten abandonados por la dirección nacional?

No. Entiendo que Génova siempre apuesta por las direcciones regionales. Pero son conscientes de cuál es la situación. Se ha decidido hacer el congreso y las listas de una determinada forma, para bien y para mal. Y habrá unos responsables de los resultados electorales que, desde luego, no serán los concejales del grupo municipal.

¿En el PP de Gijón manda Mariano Marín o Mercedes Fernández?

Es la dirección regional quien decidió que estas personas dirijan la organización. Pero es curioso que mientras Rajoy dice que España no puede caer en manos de quienes destrozaron el país ni de quienes hacen partidos solo con personas que vienen de otros partidos, en Gijón los cinco primeros puestos de la candidatura sean para personas que hace cuatro años estaba en Foro. Nosotros habríamos apostado por una lista liderada por gente con experiencia, conocedora del Ayuntamiento y del partido y con objetivos claros.

¿Qué resultado augura en las elecciones?

Cada uno ha jugado sus cartas y los gijoneses responderán. Después las cosas que estén mal habrá que modificarlas y habrá que ver por qué algunos partidos han tenido buenos resultados. Tristemente hay muchos afiliados que no votarán al PP porque no se siente representados.

¿Y usted votará a Marín?

Decimos que no preside el PP de forma legítima y voy a ser coherente. Pero el voto es secreto. Sí espero que en la ciudad siga gobernando el centro-derecha. Sea con Foro, con Ciudadanos... Pero un gobierno del PSOE y Podemos sería nefasto para Gijón.

¿Ha tenido la tentación de irse a algún otro partido?

No me gusta cambiar de chaqueta. Estoy muy orgulloso de que el PP esté sacando de nuevo España adelante, y lo que me gustaría es que también lo hiciera con mi ciudad y con mi región. Pero en Gijón necesita una transformación profunda. Espero que tengamos la inteligencia para devolver la organización a los niveles que nunca debió perder y que podamos ser una alternativa de gobierno. Y gobierno.

Entonces seguirá militando...

Esa es mi intención, aunque a algunos no les guste. Pero me voy con mucha tristeza por la situación en la que está el PP.

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