Gijón estrena «la casa de todos»

«Cuando uno mejora no tiene pena ninguna». No podía ser más clara Tita Caravera, presidenta de la Federación de Asociaciones de Vecinos de la Zona Urbana de Gijón (FAV). Si en otras ocasiones una mudanza conlleva cierta nostalgia, no ha sido el caso. La FAV cerró una etapa y ayer abrió otra de forma oficial sin ninguna tristeza. Más bien todo lo contrario. Inauguraba su nueva sede, sus 180 metros cuadrados, en la calle de la Ruta del Alba, en Moreda. Atrás han dejado dos décadas de trabajo en el Polígono, en unos locales que ya no reunían las condiciones necesarias para acoger todo lo que la federación, siempre activa y combativa, programa, celebra y lleva a cabo.

Decenas de personas se dieron cita ayer, a partir de las siete de la tarde, para este corte de cinta simbólico. Una inauguración que contó con una sola intervención, la de Tita Caravera. Estaban allí todos los partidos políticos. Pero ninguno tuvo la palabra. Empieza la campaña y no quería la FAV, que conoce como nadie el funcionamiento de la vida política de la ciudad, que su día, su acto, se convirtiera en un mitin. Así que Caravera habló y agradeció. Y dejó claro que esta, la casa de la FAV, es también «la casa de todos», que la sede de la federación vecinal está «a disposición de quien la necesita».

No tienen posibilidad de ceder espacios de forma permanente, pero siempre habrá un hueco para las entidades, formaciones y plataformas que requieran de un lugar donde mantener un encuentro. Se lo habían pedido, por ejemplo, los enfermos de hepatitis C en su reciente movilización para exigir el acceso a tratamientos.

Fueron muchos los que quisieron acompañar a la FAV. Además de todos los partidos políticos, se sumaron los sindicatos, Proyecto Hombre y la Federación de Asociaciones de Padres y Madres, FAPAS Xixón, entre otros. Y representantes de la Federación de Vecinos de Oviedo e incluso de Cavastur, la confederación vecinal de Asturias. Y, por supuesto, asociaciones de todos los barrios de Gijón. Aunque cada una tenga su propia sede, esta nueva de Moreda es, al fin, la de todos. Algunos, como Somió, Nuevo Roces, Jove y Veriña también podrán estrenar nuevos espacios.

La mudanza y la alegría por el estreno no impedirá a la FAV volver a la acción en breve. Se dan un plazo de unos quince días para acabar de situarse, para organizarse en sus nuevos espacios. Después programarán nuevas actividades. Y regresarán, sin duda, a la que desde hace meses es su principal reivindicación: exigir a las administraciones avances en el plan de vías.