«No quise atropellarlos, fue un accidente»

«No atropellé a nadie de forma intencionada, fue un accidente al dar un volantazo. Invadí la acera al intentar esquivar a dos chicos que bajaron a la calzada». El conductor de un todoterreno acusado de arrollar a cinco peatones a la salida de la discoteca Go, en El Natahoyo, negó los cinco intentos de asesinato que se le imputan y aseguró ayer en el juicio en la Sección Octava de la Audiencia Provincial que no llegó ni siquiera a saber que había atropellado a nadie. «Iba a poca velocidad y vi que unos chicos irrumpían en la carretera, así que di un volantazo y como el coche era muy pesado, se subió a la acera, pero yo en ese momento ni me enteré», declaró el conductor, M. J., de origen colombiano.

El juicio quedó suspendido después de la declaración del procesado por parte de la fiscalía por la incomparecencia del abogado que representa a la compañía del seguros del vehículo siniestrado. La acusación pública solicita para el procesado 37 años y 11 meses de prisión por cinco intentos de asesinato y la retirada del carné durante 2 años y 6 meses, así como alejamiento de las víctimas.

Antes de la celebración de la vista oral y durante una hora, las partes intervinientes intentaron llegar a un acuerdo, si bien el procesado no aceptó los 17 años y medio a los que el fiscal le proponía reducir la condena.

Los hechos que hoy volverán a ser juzgados ocurrieron en la mañana del 20 de mayo de 2012. La fiscalía sostiene que el acusado «se encontraba en la calle Mariano Pola, frente a la discoteca Go y tuvo una discusión con un grupo de jóvenes que le recriminaron el ruido que estaba haciendo, acelerando de forma brusca con su coche». El procesado, supuestamente, con sus facultades mermadas por el alcohol, abandonó el lugar en el coche, si bien dio media vuelta y, «guiado con el propósito de acabar con la vida de los cinco jóvenes», dirigió el vehículo a gran velocidad hacia el lugar en donde se encontraban y los atropelló, provocándoles graves lesiones.