Portugal se degusta en Gijón

Tomar un buen vino verde en una taberna típica portuguesa, comer bacalao o probar los patés de aceituna típicos de Coímbra son algunas de las cosas que estos días pueden hacerse en Gijón con motivo del Festival Arcu Atlánticu. El Campo Valdés, junto a la iglesia de San Pedro, se convierte en una pequeña Portugal en la que están presentes todos los productos típicos del país vecino.

En cuanto uno se acerca a él, lo primero que percibe es el olor de los quesos artesanos de la quesería Damar, procedente de la ciudad de Castelo Branco, cuya particularidad es que son amantecados y están producidos con leche de oveja y de cabra y utilizan coagulantes naturales como el cardo. Además del queso también se pueden degustar embutidos como los chorizos ahumados o la 'alheira', un producto típico de las comarcas de Trás-os-Montes elaborado con aceite, pan, pimentón, ajo y carne picada con tocino de cerdo y carne de aves, que suele comerse en fritura.

En la 'boutique do chocolate e da ginginha' se pueden probar bebidas como la sangría de frutos rojos o 'la ginja', un licor realizado a mano a base de cerezas y que contiene esos frutos con hueso en el interior de la botella.

Uno de los productos de este mercado tradicional que más llama la atención a los visitantes y que se encuentra también en este puesto es la 'cerveza de chocolate', que a pesar del nombre no tiene un sabor dulce. Con un color oscuro y un toque amargo, recibe este nombre porque al final del proceso de su producción se le añaden aromas y toques de chocolate negro.

Para los más golosos, hay destinada una zona en la que se encuentran todos los dulces típicos, como los pasteles de nata o los pasteles de Belém que se pueden degustar junto con una gran variedad de cafés artesanos.

Y a escasos metros, una taberna típica portuguesa ofrece a los visitantes 'borna de bacalao' -pan de maíz, bacalao, grelos y aceite de oliva-, sopa da pedra o ternera brava, todo ello acompañado de 'vino verde', con denominación de origen.

Información turística

La presencia de las ciudades lusas invitadas este año al Arcu Atlánticu se extiende también a la zona del puerto deportivo. En el estand de la villa de Mira -situada en Coímbra y una de las zonas más turísticas de Portugal-, se encuentran representadas las tradiciones de pesca y los trajes regionales, y se pueden adquirir también los patés de aceituna que son característicos de la zona.

En el espacio de Braga -tercera ciudad más poblada de Portugal, tras Lisboa y Oporto- invitan a realizar un recorrido por sus más de treinta monumentos de estilo barroco y explican por qué es conocida también como 'La ciudad de las campanas', debido al gran número de iglesias presentes en la ciudad.

El tercer emplazamiento luso que se puede visitar sin moverse de Gijón es Nazaré. Considerada como la villa más típica de todo Portugal, tiene ciertas similitudes con Asturias al contar con grandes playas y acantilados a escasa distancia de las montañas.

La última ciudad invitada y cuyo estand, decorado con fotografías de algunos de sus restos arqueológicos, merece también una parada es Guimarães, cuyo centro histórico fue declarado Patrimonio de la Humanidad por la Unesco en 2001 .

Es una ocasión única para disfrutar del país vecino y conocer su folclore y gastronomía sin necesidad de salir de Gijón, que podrá visitarse hasta el próximo domingo 2 de agosto.