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Nuevo Gijón rechaza un 'pinchazo' directo desde la 'Y' hasta Dolores Ibárruri

La asociación de vecinos Santiago cree que esta opción generaría «una vía de gran tránsito» que «partiría en dos» el barrio

IVÁN VILLAR

Lunes, 30 de mayo 2016, 00:45

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La asociación de vecinos Santiago de Nuevo Gijón, Perchera y La Braña reclama cambios en el vial previsto en el PGO para conectar mediante un 'pinchazo' la entrada a la ciudad por la 'Y' con la calle de Dolores Ibárruri, una infraestructura que el nuevo documento de ordenación hereda de anteriores planeamientos. «Aunque esta conexión tenía sentido en el año 1999, ha ido perdiendo vigencia con el paso del tiempo», advierten en sus alegaciones al texto urbanístico. Consideran que, tal y como viene recogida en el documento de aprobación inicial, esta actuación «generaría una vía de gran tránsito y reparto del tráfico que cruzaría el centro del barrio, partiendo en dos un espacio urbano que ahora se vive como un continuo, rompiendo así la integración de la zona en aras de la movilidad del automóvil».

La entidad cree que el acceso desde la autopista a esta zona de la ciudad debería plantearse desde un punto anterior al lugar propuesto por el PGO , que resuelve la conexión mediante una glorieta ubicada medio kilómetro antes de la actual salida de la GJ-81 hacia la avenida de la Constitución y El Musel. «Pedimos que se valoren otras opciones para conectar la autopista con otras vías urbanas secundarias o principales de manera indirecta».

Nuevos desarrollos

Los vecinos también son muy críticos con el desarrollo de nuevas viviendas que contempla el documento de ordenación y califican de «especulativo» el diseño de siete de las diez actuaciones previstas, al entender que presentan «una alta densidad edificatoria». Se refieren en concreto a las áreas de planeamiento dibujadas al este y al oeste de las zonas ya edificadas, las primeras en torno a la calle Peña Mea y la intersección de Dolores Ibárruri con la carretera de Oviedo y los segundos entre Sierra del Sueve y la 'Y'. Estos desarrollos suman un millar de viviendas, principalmente en bloques de cinco y seis alturas, incluido un edificio de quince plantas en la intersección de Peña Mea con la carretera de Oviedo.

La asociación lamenta también que en cinco de estas actuaciones no se reserve «ningún tanto por ciento para vivienda protegida» y advierte de que dos de ellas, «con desarrollos aislados y puntuales», representan «islas edificatorias que solo van a provocar problemas posteriores en cuanto a urbanización y mantenimiento de las zonas comunes». Por ello, piden que se reduzca la densidad de vivienda en los ámbitos mencionados, que se prevea un mínimo porcentaje de viviendas de protección en todos y cada uno de ellos y que se apueste por «desarrollos integrales que reduzcan la disgregación de actuaciones que después generan problemas de cohesión urbanística y de servicios». Los vecinos también echan en falta en estas zonas la reserva de espacios para desarrollo comercial.

En otra de sus alegaciones la asociación señala que el PGO no plantea para Nuevo Gijón, Perchera y La Braña una dotación de equipamientos acorde al crecimiento residencial que se propone para la zona, pese a que los ya existentes «están al límite de su capacidad». Ponen como ejemplo los colegios Alfonso Camín y Nuevo Gijón, el IES de Roces y el centro de salud de Perchera, «que no tiene capacidad para más». Añaden la situación del centro de salud de Montevil, «que no se dota de más personal por falta de recursos presupuestarios. Consideran que «plantear un crecimiento sin reflexionar sobre los equipamientos necesarios es una irresponsabilidad que van a sufrir los vecinos». En la misma línea, reclaman que se incorporen al documento de ordenación «las medidas de movilidad y transporte que se van a llevar a cabo para atender el crecimiento que se plantea en la zona».

Industria no contaminante

La asociación pide por otra parte que se explique de forma más detallada «a qué se refiere el plan cuando reserva un espacio para una zona industrial no contaminante» en paralelo a la entrada a la ciudad por la 'Y', desde el enlace de Lloreda hasta la glorieta prevista de conexión con Dolores Ibárruri. «Queremos que se aclare qué tipo de empresas se podrán ubicar ahí y cuáles son los controles establecidos para calificar a una empresa como no contaminante». La ficha urbanística APP-Y-2, que afecta a estos terrenos, indica que «la edificabilidad industrial se dispondrá fundamentalmente a lo largo de la A-8, y en todo caso se destinará a industria limpia, no contaminante. Podrá estar relacionada con la innovación, con las tecnologías de la información y comunicación, consultorías especializadas o similares, siendo posible también la implantación de industria escaparate».

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