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De izquierda a derecha en la mesa, Joaquín Fernández, Enrique Jaimez, Juan Luis García y Armando Fernández Bartolomé.
El grafeno reta a los investigadores

El grafeno reta a los investigadores

Asturias aspira a entrar en la carrera por aplicar este innovador material, más duro que el acero y mejor conductor que el cobre

N. PRIETO

Domingo, 26 de marzo 2017, 01:52

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Empezaron hablando de ciencia y acabaron hablando de política, pero no de congresos ni líderes, sino de la capacidad de los partidos para apostar seriamente por la investigación. No es raro, debido a que fue un partido, Ciudadanos, el que ayer promovió un debate sobre el reto de innovación que en todo el mundo plantea el grafeno, un material más duro que el acero y mejor conductor que el cobre, que tiene como principales características la flexibilidad, la resistencia y la conductividad, tanto térmica como eléctrica, y para el que se vislumbran usos ópticos, electrónicos e informáticos, según señaló Enrique Jaimez Falagán, gerente del Cluster de Energía, Medio Ambiente y Cambio Climático de la Universidad de Oviedo.

La Universidad asturiana ha conseguido un millón y medio de euros de la Unión Europea para financiar una investigación sobre aplicaciones del grafeno. Se trata del programa con mayor presupuesto de cuantos tiene actualmente en marcha la citada entidad.

En la mesa redonda organizada ayer por Ciudadanos en el Centro de Cultura Antiguo Instituto participaron, además, Juan Luis García Beneitez, ingeniero industrial que trabaja como jefe de proyecto de Duro Felguera; Joaquín Fernández Revuelta, director de la empresa Fernández Rapado, aliada y representante en Asturias de la coreana Graphene Square, y Armando Fernández Bartolomé, diputado de Ciudadanos en la Junta General del Principado.

Las ideas planteadas dejan un sabor agridulce, porque trascendió optimismo sobre el papel que puede tener Asturias en la carrera mundial por la aplicación del grafeno, pero no quedó tan claro la razón, ya que Jaimez Falagán, por ejemplo, tras afirmar que «es un material de futuro, desde luego», se preguntó si vamos a ganar a Samsung. El mismo participante aseveró que la región solo dedica el 0,7% de su Producto Interior Bruto a investigación y, para colmo, «la ciencia a los españoles les interesa nada».

«El Idepa no funciona bien»

Alianzas como la de la empresa Fernández Parrado con una multinacional especializada en la producción de grafeno pueden alentar la confianza en que Asturias no se quede atrás en la utilización de este producto. «El grafeno se conoce desde hace trece años -dijo Joaquín Fernández-, y se ha publicado tanto sobre él, ha creado tantas expectativas que también puede provocar cierta frustración si se demoran las aplicaciones para su máximo aprovechamiento».

Actualmente, ninguna empresa asturiana produce grafeno, al menos con fines comerciales. El grafito y un gas son las materias primas para su fabricación, pero está dicho que el reto para los investigadores no es cómo producirlo, sino cómo aprovechar mejor sus características.

Juan Luis García Benéitez lamentó que no exista en la región una Consejería de Innovación y dijo que no todo consiste en aumentar el gasto, sino en emplear bien el dinero del que se dispone. En ese sentido, se mostró crítico con el Idepa, que «es un instrumento perfecto para propiciar la innovación, pero no funciona bien».

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