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G. P.
Domingo, 25 de junio 2017, 00:23
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De poco sirvieron las advertencias y las peticiones de no dejar basura en las playas tras la celebración de la hoguera de San Xuan, festividad que dejó cuarenta toneladas de desperdicios en los arenales. La noche de hogueras dejó paso a una madrugada de limpieza en las playas de Poniente y El Arbeyal. San Xuan reunió a miles de personas en los arenales gijoneses y, tras los estragos de la fiesta, la madrugada marcaba la vuelta a la normalidad. El dispositivo especial organizado por Emulsa para readecuar las playas se puso en marcha a las seis de la mañana, al mismo tiempo que los últimos trasnochadores daban por terminada la verbena.
En Poniente, un equipo integrado por veinticinco empleados retiraron treinta toneladas de desperdicios. En El Arbeyal, los residuos acumulados alcanzaron las diez toneladas y en las tareas de limpieza, que se extendieron hasta el mediodía, participaron más de una decena de operarios. El dispositivo estuvo apoyado por medios técnicos, concretamente dos camiones, un tractor, dos máquinas barredoras y aspiradoras y una baldeadora. El volumen de residuos recogidos ayer es similar al de anteriores celebraciones de las hogueras de San Xuan, según indicaron desde Emulsa. Todo ello a pesar de que la empresa municipal había habilitado este año un mayor número de contenedores -con una capacidad de mil litros- en las zonas del paseo y había instado a los ciudadanos a recoger sus desperdicios. El despliegue especial de Emulsa se prolongará durante el verano con cincuenta y tres operarios que limpiarán a diario las seis playas del concejo y las zonas turísticas.
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