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Lunes, 4 de septiembre 2017, 01:10
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Un grupo de exalumnas de 'La Escuelona' celebró ayer, en el llagar El Fugitivo, su tradicional comida de hermandad, en la que recordaron el pasado minero de La Camocha y, también, evocaron «el espíritu familiar» que definía antaño a esta parroquia.
Así lo explicaban las asistentes que se dan cita por quinto año consecutivo. Pero no solo se trató de un reencuentro, también se han unido para conseguir que se coloque una placa que rinda homenaje a las familias mineras de La Camocha.
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