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Sábado, 13 de enero 2018, 03:14
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Las máquinas excavadoras que entraron el pasado jueves en los terrenos expropiados por el PERI de El Arbeyal siguen con los trabajos de derribo. Ayer le tocó el turno a la última vivienda unifamiliar que quedaba en la zona, anexa a una nave industrial abandonada. Las instalaciones de Mármoles Santa Olaya, por su parte, necesitan una actuación especial para que el techo de uralita no se mezcle con el resto de escombros.
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