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Un edificio, tras un ataque en Alepo.
Gran ofensiva islamista contra un bastión del Ejército sirio en Alepo

Gran ofensiva islamista contra un bastión del Ejército sirio en Alepo

"La ciudad vivió la peor noche desde la entrada de los rebeldes en julio de 2012", ha señalado el director del Observatorio Sirio de Derechos Humanos

COLPISA / AFP

Viernes, 3 de julio 2015, 17:14

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Insurgentes islamistas lanzaron una gran ofensiva para hacerse con un bastión del Ejército sirio al oeste de Alepo, antigua capital económica de Siria controlada en parte por el régimen de Bachar el-Asad. Los combates, de extrema violencia, duraron toda la noche, hasta la madrugada. Con centenares de obuses caídos tanto en sectores gubernamentales como de la oposición, "Alepo vivió la peor noche desde la entrada de los rebeldes en la ciudad en julio de 2012", indicó el director del Observatorio Sirio de Derechos Humanos (OSDH), Rami Abdel Rahman. La ofensiva fue lanzada por una nueva coalición de insurgentes islamistas, Ansar el-Sharía (Partidarios de la Sharía), cuya creación fue anunciada el jueves con el objetivo de "liberar Alepo y sus alrededores".

Esta coalición agrupa a 13 organizaciones, entre ellas el Frente Al Nosra, rama siria de Al-Qaida, y Ahrar Al Sham. Estos combatientes intentan apoderarse del cuartel general de los servicios de inteligencia del ejército del aire, en el barrio de Zahra, según el OSDH. La aviación del régimen bombardeó las zonas de combate pero la coalición islamista pudo avanzar y tomar algunos edificios de Zahra, según esta ONG, que indica que hubo 35 muertos entre los insurgentes y decenas de muertos y heridos entre las fuerzas del régimen, además de nueve civiles fallecidos.

Según la televisión oficial siria, "el ejército contrarrestó los intentos de infiltración en varias calles de Alepo, matando a más de 100 terroristas". "Estamos acostumbrados a escuchar explosiones pero ayer hubo realmente muchas. Fue muy intenso. Escuchábamos el ruido de las explosiones, pero como venía de todas partes, no sabíamos donde caían" los obuses, afirma Sahar, una estudiante de 23 años, que habita el barrio de los Siríacos, en el centro de la ciudad.

Ataques reiterados

La sede de los servicios de inteligencia del ejército del aire fue atacada reiteradas veces. En abril, los insurgentes islamistas aliados a la rama siria de Al-Qaida lanzaron sin éxito un asalto y, un mes antes, el edificio se había estremecido por la explosión de una poderosa carga subterránea. Por otra parte, los rebeldes atacaron la noche del jueves un retén del ejército en Shalla, en la entrada este de Zabadani, a 20 km al norte de la capital Damasco, que sigue resistiendo a las fuerzas del régimen.

El régimen replicó llevando a cabo 20 bombardeos y lanzando 44 barriles de explosivos sobre la ciudad, según el OSDH. Hubo tres muertos entre los rebeldes y cinco en el ejército. Según la televisión oficial, el ejército del aire "destruyó dos depósitos de municiones, un taller de fabricación de cohetes, un cañón de 23 mm y cuatro vehículos dotados de ametralladoras". Zabadani, primera localidad que cayó en manos de los rebeldes en febrero de 2012, está en la frontera entre Siria y Líbano. Tiene 65.000 habitantes, a los que se añaden numerosos desplazados. La ciudad está parcialmente rodeada desde hace cuatro años, lo que dificulta la entrada de alimentos, medicinas y carburante.

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