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El lugar donde desapareció lucía se ha llenado de peluches.

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El lugar donde desapareció lucía se ha llenado de peluches. F. Torres

Los vecinos siguen sin creer en la muerte accidental de Lucía Vivar

Una cámara de seguridad registró a la pequeña andando sola por las vías, pero cada vez son más los que se niegan a creer que pudo llegar sola hasta allí

FERNANDO TORRES

Málaga

Miércoles, 2 de agosto 2017, 09:52

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A medida que se fueron haciendo públicos algunos datos de la investigación sobre muerte de Lucía Vivar, la menor que desapareció el pasado miércoles por la noche en Pizarra y fue encontrada sin vida en las vías del ferrocarril de Álora, cada vez más vecinos se negaban a creer que la muerte fuera accidental. Ayer se supo que una cámara de seguridad registró a la niña caminando sola sobre las vías del tren, y los investigadores consideran que las imágenes dan credibilidad a dicha hipótesis.

Sin embargo, algunas de las personas que colaboraron en la búsqueda desde el primer minuto y que conocen la zona, piensan que es «imposible» que continuara andando hasta donde fue encontrada por un operario de trenes. «Hay un puente que hasta a mí me da miedo cruzar», comentaba un vecino de Álora mientras esperaba su tren, en referencia al paso elevado que se ve en la imagen, situado a unos 400 metros de donde desapareció la menor en la dirección donde se encontró el cuerpo.

Ayer por la tarde, seis días después de la desaparición, el suceso seguía marcando la conversación de Pizarra: «Esto nunca se olvidará en Pizarra», lamentaba un vecino. En cuanto alguien sacaba el tema en las proximidades de la estación, todos los que escuchaban negaban con la cabeza, escépticos. «La niña podría haber echado a andar sola como dicen que se ve en las cámaras, vale, pero ni de broma me creo que no se parara antes», señalaba una joven que colaboró en la búsqueda de Lucía.

«¿Tú de verdad te crees que haya sido un accidente? Yo me tropezaba cada dos por tres con las piedras porque no se veía nada». Las vías del tren que parten desde la estación de Pizarra en dirección Álora discurren en paralelo a varios establecimientos de tipo industrial. «Aunque ella fuera la que caminara hacia Álora alguien pudo cogerla antes de que llegáramos los que la estábamos buscando», comentaba. Todo aquel que decidía hablar de la noche del pasado miércoles subrayaba que con tres años «no tiene sentido que siguiera andando tanto rato».

No obstante, la investigación apunta a esa posibilidad, y las opiniones de los testigos se basan en su conocimiento del terreno y en la celeridad con la que se pusieron en marcha para buscar a la niña, no en pruebas concretas. A pesar de ello, creen que Lucía «no tuvo tiempo» de alejarse tanto como para que no la encontraran los equipos de búsqueda.

Evitar suposiciones

Sin embargo, un vecino que regenta una carpintería cercana recuerda que todos los que estaban sentados en las mesas aquella noche eran «conocidos en el pueblo», y que «no había nadie extraño o que no frecuentara el bar». Por tanto, las especulaciones dejan la puerta abierta a todas las teorías, así como la propia investigación.

Alhaurín el Grande, localidad natal de Lucía y de residencia de sus padres, está siguiendo el caso con la misma expectación que Pizarra: «Todo el mundo está a la espera de que se conozca la versión oficial de los hechos», explicó a Diario Sur la alcaldesa del municipio, Toñi Ledesma. La regidora aseguró confiar en la labor de los investigadores, y recomendó evitar suposiciones alejadas de las evidencias fruto del trabajo de la Guardia Civil.

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