Secciones
Servicios
Destacamos
GONZALO DÍAZ-RUBÍN
Jueves, 18 de septiembre 2014, 00:13
Necesitas ser suscriptor para acceder a esta funcionalidad.
Compartir
El secretario general del PSOE de Oviedo, Wenceslao López, confirmó ayer que disputará las primarias para elegir al próximo candidato socialista a la Alcaldía tras recibir el respaldo mayoritario de la comisión ejecutiva. La entrada en liza de Antonio Masip, la incapacidad para consensuar una alternativa con fuerza y la negativa de otros 'candidatables' acabaron por empujar a López a presentar su opción. «Asumo la máxima responsabilidad como secretario general» resumió. En un comunicado, la ejecutiva señala que «considera a Wenceslao López la mejor alternativa para defender los intereses de los ciudadanos de Oviedo» y destacan «su coherencia política, honestidad personal e intelectual, capacidad de trabajo, eficacia y conocimiento municipal demostrado, no solo como responsable político sino como ciudadano» con su denuncia de «los desastres de gestión política, urbanística y económica a los que los sucesivos gobiernos populares han llevado a esta ciudad».
La de Wenceslao López puede ser la cuarta papeleta entre las que tendrán que elegir los afiliados del partido a su candidato electoral a alcalde el próximo 19 de octubre. Pero antes, tanto Masip, como él, como los otros dos aspirantes declarados -Guillermo Peláez y Jorge García Monsalve-, deberán conseguir el aval del 20% de la militancia. López anunció ayer que renuncia a la prerrogativa que, como secretario general, le eximía del trance de pedir firmas. «Competiré en igualdad de condiciones», asumió.
Los aspirantes tendrán que confirmar su paso al frente ante la Comisión de Garantías y dispondrán de 15 días tan solo para alcanzar una cifra próxima, en el caso de Oviedo, a las 175 firmas. El número de apoyos es una de las principales barreras. En las elecciones a secretario general en las que resultó vencedor Pedro Sánchez Castejón, votaron, pese a todas las facilidades, 534 militantes de un censo de 878. Una participación que puede considerarse alta para los registros de la Casa del Pueblo, pero que indica que la afiliación activa es escasa y que reunir la confianza de más de 170 de ellos será una tarea ardua.
En ello, lleva ventaja Antonio Masip. Tras advertir a la FSA de que no quería dejar la política y que, si no repetía como eurodiputado un tercer mandato, disputaría las primarias de Oviedo, ha creado una plataforma de apoyo a su alrededor. Activo, como siempre, ha comenzado a generar ruido político y captar la atención. Muy por detrás se sitúan Guillermo Peláez y Jorge García Monsalve. Ninguno de los dos ha tenido hasta la fecha cargos orgánicos o políticos en el partido.
Alianzas rotas
No hace ni siquiera dos años, en noviembre de 2012, Antonio Masip respaldó públicamente a Wenceslao López frente Alfredo Carreño para liderar el partido en Oviedo. Dos meses después y por cuatro votos, este se convirtió en secretario general. Un cargo del que había sido expulsado hacía casi 22 años, cuando la FSA impuso una gestora al frente de la Casa del Pueblo y precipitó así el alejamiento de la política activa del que fue, con tan solo 31 años, primer candidato del PSOE a la Alcaldía y concejal durante cuatro años.
«Esas coaliciones están rotas, también las que surgieron alrededor del último congreso», señala un miembro de la ejecutiva. La dificultad de encontrar un candidato de consenso - López pidió en la última fiesta de la Rosa a los militantes que diesen nombres- amenazaba con dejar una pléyade de aspirantes con opciones menores frente a Antonio Masip. Leopoldo Tolivar tampoco aceptó presentarse
El exalcalde socialista, lo fue entre 1983 y 1991, desata pasiones entre los suyos, pero también un rechazo visceral entre otros muchos militantes y sensibilidades.
Publicidad
Publicidad
Te puede interesar
Horarios e itinerarios de la Semana Santa de Cádiz 2024
La Voz de Cádiz
Publicidad
Publicidad
Reporta un error en esta noticia
Comentar es una ventaja exclusiva para suscriptores
¿Ya eres suscriptor?
Inicia sesiónNecesitas ser suscriptor para poder votar.