Borrar
"Esto era un sueño"

"Esto era un sueño"

Cruz Díez acaba de abrir un puesto de repostería tras quedarse al paro

PPLL

Lunes, 29 de septiembre 2014, 08:17

Necesitas ser suscriptor para acceder a esta funcionalidad.

Compartir

Es el número uno y también el último. El último puesto en llegar al mercado de El Fontán es casualmente el número 1, puesto que su dueña, Cruz Díez, ha querido mantener en el nombre de su negocio de repostería. Hace solo unos días, a última hora, Díez mostraba una sonrisa que no empañaba el cansancio de una larga jornada. El día había amanecido temprano entre los nervios propios de algo que comienza, algo nuevo y desconocido. A última hora la tensión había desaparecido, como prácticamente la totalidad de los productos de su mostrador. «Ha salido muy bien. Muy bien», valoraba ya dejando atrás aquellas dudas de si gustará, si la gente se acercará.

Las galletas, por ejemplo, de maíz rellenas de manzana, o las de azúcar moreno, las casadielles o las empanadas se habían esfumado. «El balance es muy positivo. Estoy muy contenta», decía la propietaria de El 1 del Fontán, a donde llegó un poco por casualidad y un mucho por las circunstancias laborales de Cruz. Ella era una fiel cliente del mercado. Desde que llegara a la ciudad con 18 años para estudiar en la Universidad, «siempre compré en el mercado. Siempre me gustó porque lo que se vende aquí es calidad».

Un día se enteró de que el puesto que ahora ocupa se iba a quedar vacío, pues la anterior comerciante se jubilaba. «Pensé que era mi momento. Soy positiva y pienso que la vida te pone las cosas delante por algo, y decidí hacer algo que me gustaba mucho, pero que siempre lo había visto un poco como un sueño», cuenta. Porque aunque siempre cocinaba para familia, amigos o algún que otro encargo, su actividad profesional nada tenía que ver ni con la repostería ni con el comercio.

Cruz trabajó durante 23 años en una empresa que como consecuencia de la crisis económica optó por un Expediente de Regulación de Empleo (ERE). Hace año y medio se quedó sin empleo. «Estaba en el paro, que no parada, y decidí lanzarme», reconoce. Aunque algo le viene de familia, «que siempre he sido muy emprendedora». No la olvida en su nueva etapa. Ella proviene del Bierzo y a la zona dedica un rincón de su puesto. «Son productos de agricultura ecológica, los productos típicos de la zona como pimientos asados, tomate natural, castañas en almíbar, mermeladas i vinos», enumera.

Es el complemento perfecto para su producto «que es todo artesano. No lleva conservantes ni colorantes y se fabrica todo diariamente».

Reporta un error en esta noticia

* Campos obligatorios