El Cabildo renuncia a los 20.700 euros del convenio municipal «para ser libre»

La Fundación Municipal de Cultura ya no tendrá que decidir si va a conceder o no la subvención que desde hace 20 años otorgaba el Ayuntamiento sí o sí a la Catedral. Poca relevancia cobra además ahora la ronda de encuentros que mantuvo el deán con concejales de la oposición para explicar los detalles del convenio después de que en la reunión mantenida ayer con el alcalde renunciara directamente a los 20.700 euros. «Preferimos ser libres, zanjar la polémica y dejar al Cabildo más libre para poder actuar como quiera», aclaró Benito Gallego. Dentro de la cordialidad en la que ambos coinciden se desarrolló el encuentro, Wenceslao López restó importancia a su decisión.

Fue el punto de partida de una cita a la que también asistió Manuel Ángel Acebal, secretario del Cabildo, y que se alargó durante 45 minutos. Tres cuartos de hora en los que debatieron sobre el uso del jardín de los Reyes Caudillos, trataron las fiestas de San Mateo y la hoguera de San Juan, y dejaron en el aire qué va a pasar con las celebraciones que Iglesia y Ayuntamiento mantienen desde hace años como la comida de las Fresas y el Caldo, y si habrá o no presencia de la Corporación en la misa de El Salvador el próximo jueves.

Y aunque no hablaron sobre el futuro del Martillo de Santa Ana, el alcalde dejó claro tras la cita su apuesta por un Museo de la Ciudad «en el que la Iglesia no tiene que intervenir». De momento, por «la etapa que estamos viviendo», no será una realidad. «Habrá que esperar», dice, «a tiempos mejores para llevar el proyecto adelante». A falta de que lleguen, para Gallego el estado del solar es «la vergüenza de Oviedo».

Al margen del convenio, la idea del deán es seguir cobrando por entrar en la Catedral porque es la «forma de financiarnos», y dejar el jardín de los Reyes Caudillos tal y como está funcionando (se puede visitar de 11 a 13 horas por las mañanas y de 16 a 19 por las tardes). Por contra, la del tripartito es convertirlo en un parque público, permitir la entrada libre y no restringir las visitas. El debate está ahora en la titularidad del terreno. El Ayuntamiento dice que es suya (López trasladará un informe al deán), mientras que el Cabildo asegura que «la Catedral lo administra desde hace 42 años» y se han ocupado de las obras.

Nuevo horario en invierno

De cara al invierno, la Catedral quiere mantener el horario de la tarde y limitar las visitas de 16 a 18 horas. Y entiende que la propuesta municipal pone en riesgo el patrimonio. «Es una zona muy delicada en la que se llevó a cabo una rehabilitación durante años. Las últimas muy recientes». En 1973, el Ayuntamiento decidió cerrar el espacio «debido a actos vandálicos». «La Catedral tiene un valor patrimonial muy elevado y la medida supone un riesgo importante» para la zona.

Para conservar la Catedral, el deán plantea al Ayuntamiento no solo el control y la reducción de los decibelios durante las fiestas de San Mateo sino también barajar otra ubicación para los conciertos: «Las vibraciones machacan la Catedral. Además, desde el 14 al 21 de septiembre tenemos celebraciones jubilares». El alcalde, explica Gallego, dijo que buscaría una fórmula para «que todos pudieran disfrutar de sus cosas».

Pese a la reunión, no hay nada decidido en cuanto a la celebración del Caldo y la comida de las Fresas que se organizan en Trascorrales desde hace años y en las que Ayuntamiento y Arzobispado compartían comida e intercambian invitación (primero invita la Iglesia al Caldo y lo devuelve el Consistorio con las Fresas). El deán les ha dicho «que tomen la decisión que tomen actúen siempre en libertad».

Para ambos eventos aún faltan meses por delante (coinciden con el Corpus) sin embargo hay una cita, la misa de El Salvador, para la que queda una semana (6 de agosto) y en la que por tradición acudía la Corporación para festejar el patrón de la ciudad. Durante la homilía se lleva a cabo la ofrenda de ramos de laurel. De momento (hasta ayer), el deán no tenía respuesta. «Si contestan y nos dicen que vienen haremos como hasta ahora y reservaremos el espacio para la Corporación. Y si no dicen nada, entenderemos que no vienen».