Los despedidos de Trubia reclaman una «solución global» para su reincorporación

El colectivo de despedidos de Trubia se concentró ayer, fieles a su cita mensual desde mayo de 2013, frente a las puertas de la fábrica de armas. Una movilización marcada por la desconvocatoria de los paros de la plantilla (el último de los previstos se celebró ayer) ante la decisión de los sindicatos de sentarse a negociar con la empresa tras presentar este martes una propuesta para crear una bolsa de empleo con relevistas y exobreros, intentando así alcanzar un acuerdo que desbloquee el conflicto.

Lejos de aplaudir, la plataforma de despedidos consideró ayer que la base para negociar no es admisible: «No refleja nuestra expectativas. En ese documento apunta a soluciones individuales y lo nuestro es un problema global. Deben de readmitirnos en conjunto», explicó uno de los portavoces del grupo, que ayer transmitió este mensaje al comité de empresa y espera mantener una reunión para conocer los detalles. Por el momento, en una primera valoración, estimó que el documento «excluye» de entrada a parte de este grupo y «vuelve a hablar de perfiles, cuando a nosotros no nos despidieron por perfiles», insistió.

El problema en la fábrica de armas de Trubia viene del Expediente de Regulación de Empleo (ERE) a plicado en mayo de 2013, apenas unos meses después del cierre de La Vega y el anunciado plan de integración para garantizar el empleo. La plantilla de la fábrica se mermó a casi la mitad y el resto se vio afectado por su mayoría por un ERTE que aún continúa en aplicación ante la bajada de la producción.

Los sindicatos han intentado desde entonces luchar por conciliar la reincorporación de los despedidos y relevistas con garantizar los puestos de trabajo del personal contratado en la actualidad. Una defensa que, en ocasiones, le ha hecho tensar las relaciones con la empresa y, a la par, con la plataforma de 55 despedidos. En septiembre anunciaron doce nuevos paros reclamando una bolsa de empleo con relevistas y despedidos. Los tres primeros se desconvocaron ante la apertura del diálogo, que se rompió en una reunión el día 17 al considerar que Santa Bárabara les excluía al querer contratar solo por perfiles y no aportarles información sobre la llegada de nuevos contratos, como el de construcción de barcazas para el vehículo inglés. Ahora, volverán a intentar alcanzar un acuerdo y si no, regresarán a las movilizaciones.