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Por esta estructura abandonada tendrá que abonar el Consistorio más de tres millones. Naranco Wellnes iba a construir un centro acuático.
El juzgado condena al Ayuntamiento de Oviedo a pagar 3,3 millones por el spa del Naranco

El juzgado condena al Ayuntamiento de Oviedo a pagar 3,3 millones por el spa del Naranco

La magistrada urge una nueva liquidación que incluya una valoración de daños y perjuicios

Gonzalo Díaz-Rubín

Sábado, 21 de enero 2017, 02:06

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El Juzgado de lo Contencioso-Administrtivo Número 6 de Oviedo ha estimado parcialmente el recurso presentado por Naranco Wellness, la concesionaria del spa del Naranco, contra la liquidación del contrato. La sentencia, de veintidós folios, es compleja y abierta. En lo sustancial, reconoce el derecho de la empresa, ahora en liquidación, a cobrar por las obras ejecutadas y abandonadas, que el propio Ayuntamiento valoró en 3,3 millones de euros, y los correspondientes intereses de demora. La cifra definitiva tendrá que esperar. No mucho, porque la magistrada Belén López mete prisa al Ayuntamiento para que tramite «sin dilación» un expediente nuevo de liquidación del contrato, en el que partiendo de los 3,3 millones de euros «como valor de la obra ejecutada» se incluya también una nueva determinación de «daños y perjuicios y su importe».

La jueza estará vigilante. La resolución municipal «será susceptible de control ante este juzgado», pero también sus tiempos. Advierte en el fallo que supervisará también «el impulso de ese procedimiento en aras a evitar dilaciones indebidas, máxime a la vista del expediente administrativo en el que se suceden las declaraciones de caducidad» de la resolución del contrato.

La magistrada, eso sí, no pone una fecha tope en una resolución que puede ser recurrida en apelación y en un caso que tiene su origen en 2005. Fue entonces cuando una desconocida sociedad llamada Gestión, Solución y Calidad solicitó la apertura de un procedimiento para la contratación de la concesión de obra pública para un centro lúdico, deportivo y de salud en una parcela municipal de Prados de la Fuente. Lo hizo al calor de la reforma de la Ley de Contratos de las Administraciones Públicas de 2003, cuando las grandes constructoras lograron mayores garantías para las fórmulas de colaboración público-privada y nació el contrato de obra y concesión.

Aunque la liquidación del spa pueda parecer un 'pequeño' Calatrava, no es el caso. En la sentencia sobre la liquidación del contrato de 'los palacios', la justicia dedicó páginas y páginas a argumentar que se trataba de un contrato «complejo» y no uno concesional y, de paso, librar al Ayuntamiento de abonar los 96 millones del valor de la obra ejecutada que pedía Jovellanos XXI. Ahora la jueza apenas dedica a unas líneas de su sentencia a recordar el artículo 266 de la Ley de Contratos que reza que «el órgano de contratación abonará al concesionario el importe de las inversiones realizadas». Lo mismo que una autopista de las radiales rescatadas de Madrid. La diferencia se halla en que el contrato de 'los palacios' es de 2001, anterior a la reforma de la ley de Contratos.

Siete ruinas

Una reforma legal a la que Oviedo se sumó con entusiasmo y llegó a anunciar siete complejos deportivos y de ocio que se construirían, financiarían y se gestionarían bajo la fórmula del contrato de obra y concesión. Agustín Iglesias Caunedo, entonces concejal de gobierno de Presupuestos, llegó a sumar conjuntamente la inversión municipal y la privada en estos proyectos para defender las cuentas para 2007 y lucir hasta 86 millones de euros en nuevas dotaciones. La lista de proyectos abarcaba centros deportivos o residencia de mayores en Ciudad Naranco, La Florida, Las Caldas, Montecerrao, La Corredoria y La Manjoya, más otros que no llegaron a ser planteados. Se trataba, declaró entonces Caunedo, de una «nueva fórmula de financiación» que permitirá al Ayuntamiento continuar mejorando su red de instalaciones deportivas.

Siete años después de la apuesta masiva por este tipo de contratos, solo dos de los equipamientos han entrado en servicio (el gimnasio Go Fit y la residencia Ovida, ambos en Montecerrao), y no sin dificultades. La crisis se ha cebado con una fórmula que necesitaba una importante inyección de dinero. Para 2006, el equipo de gobierno ya contabilizaba millonarias inversiones privadas: 14,3 millones de euros en La Florida (un spa y un geriátrico); 13, en Montecerrao (un spa); 23, en Rubín y La Corredoria (un spa y un geriátrico en la primera y unas instalaciones menores en la segunda); 13,1 millones, de los que pondría 3 el Ayuntamiento, en Ciudad Naranco; 3,3 millones (unas instalaciones deportivas con campos de fútbol) en Las Caldas para completar el Balneario; 22, en un complejo intergeneracional en Montecerrao; y otras, que no llegaron a cuantificarse.

Todos, salvo los antedichos, quebraron o no llegaron ni a iniciarse. Tapar los agujeros le ha costado al Ayuntamiento veintidós millones de euros, casi todos provenientes de los fondos de los 'planes E'.

Lo que costará la resolución del spa de Ciudad Naranco aún no se sabe. El Ayuntamiento llegó a formular una doble declaración de daños y perjuicios. En una reclamaba a la empresa más de 4 millones de euros si decidía continuar la obra y en otra solo 411.000 si decidía derribarla. El equipo de gobierno optó por la segunda. Caunedo anunció un polideportivo multiusos con capacidad para diez mil personas. Todo seguirá en ruinas.

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