El conductor ebrio que huyó tras intentar arrollar a un policía en Oviedo acepta seis meses de prisión

El conductor detenido en la tarde de ayer tras una persecución policial de película por las calles de Oviedo ha sido condenado a seis meses de prisión y a la retirada del carné de conducir durante doce meses. La Fiscalía había solicitado inicialmente nueve meses de prisión y un año y seis meses de retirada del permiso de conducir por un delito contra la seguridad vial por conducción temeraria con el agravante de hacerlo bajo los efectos del alcohol, pero finalmente fue rebajada tras alcanzar un acuerdo.

Los hechos ocurrieron a primera hora de la mañana de ayer. A las siete y media, una patrulla de la Policía Judicial se percató de que un vehículo, un Peugeot Partner, iba dando bandazos por las inmediaciones del parque de El Campillín. Los agentes, de paisano, lo interceptaron con su coche en el semáforo de la calle Padre Suárez. En el momento que uno de los agentes se bajó del automóvil para identificar al conductor, éste emprendió la huida no sin antes intentar atropellar al policía que no sufrió daño alguno. En ese momento comenzó la persecución.

El conductor, a toda velocidad, enfiló la calle Marqués de Gastañaga. Al llegar a su intersección con la de Magdalena, el hombre embistió uno de los pivotes ubicados en el acceso a la calle peatonal. Este choque no detuvo su huida y continuó su marcha a toda velocidad en dirección a la calle Arzobispo Guisasola. La patrulla de la Policía Local le siguió los pasos hasta la rotonda de San Lázaro. En este punto, el perseguido tomó una decisión 'kamikaze': enfiló la ronda Sur en sentido contrario. Una acción que pudo acabar en trágicas consecuencias.

En su recorrido por el carril contrario, el conductor llegó a la rotonda de Fozaneldi. En ese punto, en la glorieta del hotel Santo Domingo, los agentes que le perseguían le perdieron la pista. En ese momento, todo el operativo móvil de coches patrullas y motos de la Policía Local ya se había puesto en marcha para localizar el coche huido. No tardaron en hacerlo y tampoco tuvieron que ir muy lejos. Una patrulla interceptó el vehículo en la calle La Regla. Los agentes ordenaron al conductor que se bajara del automóvil. Lo hizo, sí, pero lejos de poner punto y final a toda una mañana de adrenalina, la historia continuó. El joven, de treinta años y vecino de La Manjoya, se bajó del coche y emprendió una nueva huida, esta vez a pie. Trató de escapar de los agentes, pero finalmente fue detenido.

Pidió disculpas

En el momento de la detención, el joven llegó a pedir disculpas a los agentes por todo lo sucedido. El detenido fue trasladado hasta el cuartel de Rubín, donde se le realizó la prueba de alcoholemia. El resultado no dejó lugar a dudas: un miligramo por litro de aire espirado. Esto es, cuadruplicó la tasa de alcohol permitida. El joven, además, confesó que había consumido cocaína. Por todo ello, el hombre fue trasladado hasta los calabozos de la Jefatura Superior de Policía de Asturias..

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