El Ayuntamiento de Oviedo espera notificar las multas con normalidad en semanas

«Nos hemos visto pillados en medio del recurso de la empresa y hemos tenido que tirar de recursos propios hasta donde hemos podido. Con la nueva adjudicataria esperamos ir recuperando el ritmo normal en las próximas semanas», expuso el concejal de Seguridad Ciudadana, Ricardo Fernández.

De hecho, la demora en la adjudicación ha impedido hasta ahora destinar a cuatro de los agentes de la Policía Local adscritos al negociado de Sanciones al servicio ordinario de calle, aprovechando la incorporación, tras la sentencia de La Auxiliar de Recaudación, de nuevo personal administrativo. Un cambio que podría producirse en las próximas semanas a medida que el atasco baje con los nuevos servicios postales.

Lo que no puede cuantificar aún el equipo de gobierno es cuántas sanciones o por qué importe se han perdido en estos meses. La Policía Local impone una media de 3.567 sanciones al mes (datos de 2016), pero la cifra oscila entre más de 5.000 y menos de 2.500, dependiendo del volumen de tráfico o de la realización de campañas especiales. También será más fácil que hayan prescrito las sanciones leves (lo hacen a los tres meses) que las graves, como las de los 'foto-rojo' que decaen a los seis.

El Grupo Municipal del PP anunció ayer que presentará una batería de preguntas a la comisión correspondiente para aclarar la situación y conocer si el equipo de gobierno obró de forma correcta ante los problemas con las notificaciones. Por su parte, el otro grupo de la oposición, Ciudadanos, considera que el problema de las multas prescritas por el recurso presentado por Correos «es una de las consecuencias que tiene aprobar los presupuestos en mayo, con cinco meses de retraso».

En un comunicado, su concejal Luis Zaragoza vinculó el retraso en la aprobación de las cuentas a que, «si surgen problemas en las licitaciones, nos pilla el toro y el lento aparato de la Administración se vuelve incapaz de cumplir con los procedimientos a tiempo. Y eso es exactamente lo que pasó el año pasado, junto con la nefasta remunicipalización de la recaudación, que se hizo deprisa y corriendo».