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Eleazar García, Julio Rodríguez, Tito Fernández, Pipi Fernández y Mari Carmen García. Pablo Lorenzana
Los héroes voluntarios de Trubia

Los héroes voluntarios de Trubia

Los bomberos cumplen tres décadas de ayuda, trabajo y esfuerzo

Rosalía Agudín

Oviedo

Domingo, 17 de junio 2018, 04:42

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Echan la memoria atrás y recuerdan que los inicios fueron complicados. No tenían experiencia ni tampoco la formación necesaria para sofocar un incendio en Química del Nalón o sacar a los pasajeros heridos en un accidente de tren en Vega de Anzo.

Ahora, los bomberos voluntarios de Trubia miran al pasado y se dan cuenta de todo lo que han conseguido. Son los primeros que acuden al lugar de los hechos cuando ocurre una emergencia a orillas del río Nalón y son los encargados de relatar a los bomberos de Oviedo cómo está la situación: «Hay vecinos que ya nos llaman directamente cuando hay un suceso. Si la emergencia no es grave somos nosotros quienes la atendemos, pero si es de gran calado avisamos a Rubín para que nos manden refuerzos», explica Julio Rodriguez, fundador de este servicio hace ahora treinta años.

Estos refuerzos tardan un mínimo de «veinte minutos en llegar a Trubia» y, según cuenta Rodríguez, en este tiempo un incendio puede volverse incontrolable. «Las labores de extinción durante los primeros momentos son esenciales», destaca para, a renglón seguido, recordar que las primeras emergencias que atendieron fueron en medio del monte.

«A finales de los años 80 se desató una oleada de fuegos forestales en Trubia. Los bomberos de Oviedo no daban abasto para atender todas las llamadas y propuse, junto a la Policía Local, la creación de un cuerpo de voluntarios», rememora Rodríguez.

La idea fue bien vista por los concejales que estaban al frente del Ayuntamiento y ordenaron que «nos bajasen un camión antiguo del Servicio de Extinción de Incendios y Salvamento (SEIS). También hicimos cursos para aprender a trabajar con materiales peligrosos de Química del Nalón o cómo actuar ante un incendio».

Imagen principal - Los héroes voluntarios de Trubia
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Desde entonces han atendido todo tipo de emergencias y el domingo estuvieron doce horas al pie del cañón tras las inundaciones registradas por culpa de la lluvia en Trubia. «Trabajaron de forma incansable hasta las cuatro de la mañana», relata la jefa del servicio de Bomberos, Carmen del Prado.

Esta no es la primera inundación que atienden este año. Llevan unas cuantas, pero las actuaciones que más les han impactado son aquellas en las que tuvieron que rescatar a amigos, gente joven o accidentes como el ocurrido hace un cuarto de siglo en Vega de Anzo (Grado).

Dos trenes de FEVE, uno de mercancías y otro de pasajeros, chocaron en el interior del túnel cercano a la estación moscona. Fallecieron doce personas por culpa de un error humano. De igual forma, han atendido emergencias en Proaza, Quirós o Candamo. «En estos concejos no había servicios de incendios y nos llamaban a nosotros», recuerdan.

Amor y espicha

La plantilla de los bomberos voluntarios de Trubia quiere celebrar por todo lo alto su treinta aniversario. Pretende organizar una espicha a la que vayan los bomberos voluntarios que han pasado por el servicio. «Ahora somos siete pero hubo épocas en las que éramos catorce», destaca Rodríguez. Durante esta jornada festiva recordarán aquellas actuaciones que aún tienen grabadas en la retina y cómo surgió el amor entre algunos de los integrantes del servicio.

«Aquí conocí a mi mujer», comenta Tito Fernández, que entró en la agrupación hace treinta años. «Fue Rodríguez quien me metió aquí. Nunca antes había pensado en ser bombero voluntario pero la experiencia tras treinta años es muy gratificante».

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