Secciones
Servicios
Destacamos
ROSALÍA AGUDÍN
OVIEDO.
Miércoles, 13 de diciembre 2017, 01:21
Necesitas ser suscriptor para acceder a esta funcionalidad.
Compartir
El Juzgado de Instrucción número 1 decretó ayer el ingreso en prisión del joven, de 21 años y origen saharaui, detenido el pasado domingo junto a un amigo después de que una mujer, de 30 años, fuera retenida en un edificio abandonado del Oviedo Antiguo, en la calle Regla, y «al menos uno de ellos» le hubiera «manoseado sus partes íntimas», según denunció en comisaría.
La magistrada Marta Iglesias López le atribuyó los delitos de agresión sexual y detención ilegal, y atendiendo a la petición de la Fiscalía ordenó su ingreso en prisión, comunicada y sin fianza, debido a «la gravedad de los hechos y ante la existencia de riesgo de fuga del detenido y para evitar una posible reiteración delictiva», informó el Ministerio Fiscal.
El amigo que le acompañaba cuando presuntamente retuvo a la víctima, T. N. F., de 19 años y de origen senegalés, ha quedado en libertad provisional ya que no ha quedado acreditada su participación en los hechos.
Una patrulla de la Policía Nacional trasladó desde los calabozos hasta los juzgados a los detenidos, que permanecían en dependencias policiales desde el pasado domingo. Eran las nueve de la mañana. En un principio, su comparecencia ante el juez de guardia se estableció para el mediodía; sin embargo, la acumulación de casos tras el puente de la Constitución hizo que la declaración se retrasase dos horas. Al finalizar, M. B. S. A. fue trasladado directamente, a las cuatro de la tarde, al Centro Penitenciario de Asturias, donde permanecerá hasta la celebración del juicio ante el riesgo de fuga y para evitar que reincida en su comportamiento.
Por su parte, M. T. N. F. quedó en libertad provisional. Salió del juzgado de guardia pasadas las tres de la tarde, acompañada por su abogada. Tras una pequeña conversación entre ambos en la calle, el joven continuó su ruta en solitario.
Los hechos por los que ambos fueron detenidos tuvieron lugar a las 8.45 horas del domingo. Un vecino de El Antiguo alertó a los agentes de la Policía Local que habitualmente patrullan en la plaza de la Constitución que acababa de ver a dos chicos forcejeando con una mujer en la calle Regla. De inmediato, los efectivos se personaron en un edificio abandonado de la citada vía, el número 36, y se encontraron a la chica «en un gran estado de confusión».
Fue entonces cuando la víctima explicó a los agentes que «al menos uno de los hombres» la había retenido en contra de su voluntad en el interior del inmueble y la «había manoseado en sus partes íntimas». Los policías detuvieron a los dos jóvenes y de forma paralela se puso en marcha el protocolo de actuación en materia de agresiones sexuales.
Una ambulancia trasladó hasta el Hospital Universitario Central de Asturias (HUCA) a la víctima. Allí fue examinada por los médicos de Urgencias y pocas horas más tarde fue dada de alta. Por la tarde acudió a la comisaría de la Policía Nacional para prestar declaración: ratificó los hechos y también relató que le habían robado el bolso durante la madrugada del domingo, aunque no pudo precisar si los arrestados eran los responsables de este delito.
Mientras tanto, ellos fueron trasladados hasta los calabozos, donde permanecieron cerca de 48 horas. A lo largo de la tarde del lunes, los agentes de la Jefatura Superior de Policía de Asturias intentaron que ofrecieran su versión de los hechos, sin embargo ambos rechazaron hacer declaraciones.
El suceso no ha pasado desapercibido para los vecinos de la calle Regla, situada cerca de la Ronda Sur. Algunos viandantes afirman que por las noches «impone ir por esta vía». Alegan que hay poca iluminación y suelen usar otras calles alternativas para evitar algún susto, tal y como relató Helena Palacio. Otros destacan que el edificio donde tuvieron lugar los hechos lleva abandonado dos años tras la marcha del último inquilino y ahora ha sido okupado por jóvenes ajenos a la propiedad.
Las noches «hay movidas como peleas», la última se produjo hace tan solo unos días. Fueron los vecinos los que alertaron a la Policía Local de que estaba ocurriendo y «cinco minutos» después ya estaban aquí, destacó uno de los inquilinos de la zona.
A pesar de las quejas, el concejal de Seguridad Ciudadana, Ricardo Fernández, destacó que durante los últimos meses se han incrementado el número de controles policiales de la zona, debido a que algunos edificios han sido okupados a pesar de que los inmuebles han sido tapiados.
Publicidad
Publicidad
Te puede interesar
Publicidad
Publicidad
Reporta un error en esta noticia
Comentar es una ventaja exclusiva para suscriptores
¿Ya eres suscriptor?
Inicia sesiónNecesitas ser suscriptor para poder votar.