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El ala este del Seminario, donde se ubicaba el colegio La Asunción, afrontará la primera reforma por 2,5 millones. ALEX PIÑA
La reforma del Seminario contará con licencia municipal «en dos meses»

La reforma del Seminario contará con licencia municipal «en dos meses»

El Consejo de Patrimonio da el visto bueno a las obras, que suponen una inversión de diez millones de euros a lo largo de una década

D. LUMBRERAS

OVIEDO.

Viernes, 20 de abril 2018, 03:27

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La reforma y rehabilitación del Seminario Metropolitano, en Prao Picón, supone una inversión de diez millones de euros a lo largo de una década. Según ha podido saber este diario, tras el visto bueno del Principado, necesario por tratarse de un edificio con protección parcial en el Catálogo Urbanístico de Oviedo, la licencia de obra municipal se encuentra encarrilada y «en un par de meses estará todo listo».

La primer actuación, y la más importante, en esta estructura proyectada en 1944 y con 35.624 metros distribuidos en cuatro plantas sobre rasante y cuatro semisótanos, será la ejecución de una nueva residencia para seminaristas con cincuenta plazas. Una inversión que ascenderá a 2,5 millones de euros.

El expediente de la licencia, iniciado el 14 de octubre de 2016, ha tenido un largo recorrido. En noviembre obtuvo una calificación desfavorable en el cumplimiento de la normativa contra incendios, con lo que, tras presentar nueva documentación, no obtuvo todos los parabienes municipales hasta marzo del año pasado. Entonces fue remitido a la Comisión Permanente del Consejo de Patrimonio Cultural de Asturias, que dio un primer aprobado.

No fue suficiente. Los técnicos reclamaron enmiendas al proyecto que firma el arquitecto Daniel Cortizo y finalmente concedieron el plácet el mes pasado, una vez que «se renuncia a cualquier intervención sobre las vidrieras existentes y sobre las puertas de acceso y las carpinterías exteriores».

Con todo, se advierte expresamente que la intervención «deberá incluir la conservación y/o recuperación de los elementos originales de la fachada»; los elementos repuestos deberán integrarse en el conjunto con el mismo material y, a ser posible, la misma técnica constructiva que los originales; y los nuevos, como un ascensor, deben respetar la configuración primitiva de la estructura. Tampoco se pueden modificar los jardines exteriores.

El espíritu de esta reforma es lograr que el Seminario, con solo diecinueve residentes permanentes tras llegar a tener seiscientos, se adapte al siglo XXI, rentabilizando el espacio y haciéndolo más eficiente energéticamente. De este modo, y con la nueva residencia, la dirección del centro espera ir liberando recursos con los que ir sufragando las sucesivas fases de obras sin «hipotecar la diócesis».

Junto con la residencia, se modernizará la zona académica, con aulas y despachos en la planta baja y en la primera del pabellón central, así como el cambio de lugar a un espacio más amplio de la biblioteca. Asimismo, se adecentarán los espacios de acogida, que reciben cerca de 12.000 visitantes al año, y subiendo.

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