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Gaspar Llamazares, ayer, en la sede de Izquierda Unida en Oviedo.
PSOE e IU fuerzan que el Congreso aborde la próxima semana la reforma electoral del PP

PSOE e IU fuerzan que el Congreso aborde la próxima semana la reforma electoral del PP

La Cámara estudiará la petición de ambos grupos para que Rajoy explique sus intenciones; los populares se oponen y acusan a los socialistas de «cargarse el diálogo»

ANDRÉS SUÁREZ

Sábado, 23 de agosto 2014, 00:42

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PSOE e IU quieren escuchar de boca del presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, el por qué de su apuesta por impulsar una reforma de la ley electoral para modificar el sistema de elección de los alcaldes cuando apenas quedan unos meses para las elecciones locales de la primavera y, de paso, escenificar la soledad del PP en la defensa de esta iniciativa. Ambos grupos han registrado una solicitud de comparecencia del jefe del Ejecutivo que se debatirá en la reunión que celebrará la próxima semana la diputación permanente del Congreso, el órgano que rige los destinos de la Cámara fuera de los periodos ordinarios de sesiones. El movimiento no gustó a los populares, que a través de su vicesecretario de política autonómica y local, Javier Arenas, acusó a los socialistas de «querer cargarse el diálogo».

La intención del PP de propiciar el cambio de la normativa electoral para favorecer que en los ayuntamientos gobierne la candidatura más votada ha chocado de bruces con el rechazo general de la oposición. PSOE e IU son especialmente beligerantes y quieren que Rajoy se explique. Y que lo haga rápido. Si no bailan las fechas, será el martes cuando la diputación permanente analice esta solicitud de comparecencia y, por primera vez, el Congreso toque un asunto tan espinoso. Aunque, como constatan las declaraciones de ayer de Arenas, el PP no está por la labor de autorizar la intervención del presidente en un futuro pleno. La vetará, de hecho.

«La iniciativa es absurda», clamó Arenas. «Hemos dicho cien veces que en septiembre íbamos a ofrecer a todos los grupos parlamentarios nuestras propuestas y que también queremos oír las suyas, y que todavía no hay tomada ninguna decisión», añadió. Y apostilló: «El PSOE quiere cargarse el diálogo y sus candidatos que perdieron las elecciones y son alcaldes no quieren ningún cambio».

El PSOE, que pretende liderar un frente de la oposición que frene las intenciones del Gobierno, quiere escenificar la soledad de los populares en este asunto, quizá la mejor forma de presión para intentar que la reforma no cuaje. Su secretario de Organización, César Luena, acusó al Gobierno de «pervertir las formas democráticas» a través de una «trampa ventajista» que solo buscaría «retener alcaldías» por el camino que fuese. «Rajoy debe explicar si detrás de la propuesta está el Gobierno o los alcaldes miedosos del PP», dijo, convencido de que, una vez puesta en evidencia su falta de apoyos, el Ejecutivo «no se atreverá» a llevar adelante sus planes.

IU está en la misma clave. Su portavoz, José Luis Centella, tildó de «involucionista y antidemocrática» la propuesta y señaló que si Rajoy se niega a comparecer quedará clara «la falsedad de su oferta de diálogo, por mucho que se les llene la boca diciendo que quieren oír opiniones distintas». Centella explica la reforma en el interés del PP por «atornillar a la mayoría de sus alcaldes a unos sillones que no han sabido defender en estos tres años».

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