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Villa, en una visita al pozo Candín, en 2012.
Fernández Villa justificó ante Hacienda que su fortuna oculta era una herencia de su madre

Fernández Villa justificó ante Hacienda que su fortuna oculta era una herencia de su madre

Remitió al fisco los impresos por internet. Anticorrupción valora pedir una nueva prórroga para continuar la investigación sobre el ex secretario general del SOMA

E. C.

Lunes, 27 de octubre 2014, 02:05

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José Ángel Fernández Villa justificó ante Hacienda su fortuna oculta, de 1,4 millones de euros, como una herencia recibida de su madre. Según recoge una información publicada por 'El País', el ex líder del SOMA cumplimentó los trámites para acogerse a la amnistía fiscal abierta en 2012 por el Gobierno del PP a través de internet.

Una herencia de su madre, Ludivina, que falleció en enero de 2011 a los 91 años de edad y que regentó durante décadas junto a su marido un pequeño bar en Tuilla, es la coartada esgrimida por Villa para justificar la posesión de esos 1,4 millones. Así lo apuntan las pesquisas de la Fiscalía Anticorrupción, que ya ha prorrogado su investigación en una ocasión y que volverá a hacerlo en las próximas semanas en busca de nuevos indicios sobre el origen presuntamente delictivo de ese capital.

José Ángel Fernández Villa cumplimentó los modelos de declaración 750 (autoliquidación) y D-750 (relación de bienes y derechos) y los presentó a través de internet en la sede electrónica de la Agencia Estatal de Administración Tributaria (Aeat).

En el marco de la regularización de ese dinero el histórico dirigente sindical pagó a Hacienda 140.000 euros, el 10% de la cantidad aflorada. En el proceso fue asesorado por un abogado de su confianza. El local donde se ubica el bar todavía pertenece a la familia Villa. Fue legado a los hermanos, cinco contando al ex dirigente del SOMA, aunque dos de ellos ya han fallecido.

José Ángel Fernández Villa ha sido expulsado tanto del sindicato al que perteneció durante gran parte de su vida como del PSOE después de conocerse los hechos. Ha sido citado por la Junta General del Principado para comparecer, en su calidad de miembro del consejo de administración de Hunosa, y dar explicaciones sobre el origen de esos 1,4 millones de euros, aunque pocos en el seno del Parlamento regional creen que acudirá a esa llamada. En el seno de la Cámara también se ha activado una comisión de investigación que se ocupará del asunto y de la gestión de los fondos mineros.

En los últimos días ha estado ingresado en el Hospital Universitario Central de Asturias aquejado de problemas de salud, aunque ya está de vuelta en su domicilio ovetense. Tras una semana en el hospital su mejoría era visible estos últimos días, porque comenzaba a mantener alguna conversación coherente y estaba más consciente, hasta el punto de que ayer abandonó el centro hospitalario. Lo hizo por una puerta trasera, acompañado de su mujer y sus dos hijos, y utilizando un ascensor de servicio. Pese al alta médica, no sería extraño que su deteriorada salud sea su argumento para no comparecer ante la Junta como miembro del consejo de administración de Hunosa el próximo 4 de noviembre, para explicar el origen de los 1,4 millones. En ese caso, se repetiría lo ocurrido el lunes, cuando Villa no acudió al acto de conciliación convocado por la organización sindical de la que fue secretario general durante 35 años, ausencia que ha dado luz verde al SOMA para seguir adelante con su expediente de expulsión.

El presidente del Principado, Javier Fernández, aseguraba ayer que no ha tenido comunicación alguna con el sindicalista desde que se conoció que está siendo investigado por la fiscalía. «No ha habido comunicación ni la va a haber», declaró durante los actos previos a la ceremonia de los Premios Príncipe. Reiteró que se había sentido «especialmente dolido» por este caso por la «fuerte relación personal y política» que les unía y que, tras conocer la noticia, pasó «de la perplejidad a la incredulidad» cuando vio que el ex líder sindical no lo negaba.

La semana pasada, El PSOE y el SOMA volvieron a reunir a sus «cuadros» de las cuencas, según los definió el presidente del Principado, Javier Fernández, para escenificar su unidad de acción ante el 'caso Villa', lo que el jefe del Ejecutivo definió como «terrible mazazo» en dos ocasiones seguidas, a las puertas de la Casa del Pueblo de Mieres, donde se celebró el encuentro.

El secretario general del SOMA, José Luis Alperi, destacó en público y en las conversaciones más reservadas que hacía «mucho tiempo» que no se celebraba un encuentro así, y que éste servía para «recuperar la unión», así como para robustecer «la cohesión» entre ambas organizaciones.

Porque a la «cohesión y al trabajo» llamaron tanto Fernández como Alperi. Ambos quieren mirar más al futuro que al pasado, máxime teniendo en cuenta, en palabras del presidente, que «hay un trabajo que hacer, un trabajo político y otro sindical, y no nos vamos a quedar aplanados por una noticia, que fue muy dura para nosotros, pero que tenemos la obligación de superar».

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