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El portavoz de Podemos, Emilio León, escucha a Javier Fernández, ayer, en el turno de preguntas al presidente de la Junta General del Principado.
Fernández niega una financiación irregular del PSOE y amenaza a Podemos con una querella

Fernández niega una financiación irregular del PSOE y amenaza a Podemos con una querella

El presidente cree que Areces no será imputado por el 'caso Renedo' y señala que el listón interno del partido, en todos los casos, es la apertura de juicio oral

ANDRÉS SUÁREZ

Sábado, 30 de abril 2016, 04:29

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Es tiempo de precampaña y ese ambiente preelectoral se percibe mejor que en ningún sitio en la Junta General. El habitual turno de preguntas al presidente de los viernes esquivó ayer casi por completo los asuntos relativos a la gestión del Gobierno y se zambulló en un agrio debate político, con el 'caso Renedo' como principal protagonista. Fue el portavoz de Podemos, Emilio León, quien encendió la mecha al acusar al jefe del Ejecutivo y secretario general de la FSA, Javier Fernández, de proteger a Vicente Álvarez Areces al garantizarle, por la vía de un escaño en el Senado, el aforamiento. Fernández se revolvió y retó a la formación morada a dejarse de medias tintas y, en caso de pensar que existe una financiación irregular en el PSOE asturiano, que negó tajantemente, tenga el «coraje» de denunciarlo abiertamente, sin esconderse en el uso del término 'presunta'. Eso sí, les dejó claro que entonces caerá sobre sus hombros la pertinente querella.

Nunca han dado el PSOE y Podemos, ni al inicio de la legislatura asturiana ni ahora que se acerca su primer aniversario, síntomas de entendimiento. Y ahora, con una nueva llamada a las urnas a la vuelta de la esquina, menos todavía. La coincidencia entre el periodo preelectoral y el desarrollo del juicio del 'caso Renedo' da además una baza a Podemos que León y los suyos no están dispuestos a desaprovechar. La formación morada utiliza el escándalo para poner en tela de juicio toda la trayectoria socialista y, en concreto, los gobiernos de Areces. Y exprime la circunstancia de que este haya ocupado un escaño en el Senado y esté ahora en disposición de repetir.

«Areces duerme tranquilo porque está aforado, pese a que el agua le llega al cuello», espetó León de inicio. Dio a entender que Fernández le protege al recordar su pasado como ex consejero en sus gobiernos y como responsable de situarle en la candidatura al Senado. Y atacó la posibilidad de que «el presidente de los barracones» -en referencia al 'caso Renedo' y el presunto desvío de fondos de la Consejería de Educación y las carencias que Podemos denuncia en los colegios - «siga aforado, pueda volver a estar en las candidaturas y sea imputado en plena campaña». Una hipótesis que llamó a evitar. «O le echa usted o lo haremos nosotros», lanzó León, retador, al presidente.

A León le respondió raudo Fernández. Lo hizo intentando mezclar temple y contundencia. Temple porque es un hecho que el asunto le incomoda y porque quienes están sentados en el banquillo son cargos de gobiernos socialistas y a quien apunta políticamente Podemos es nada más y nada menos que a un ex presidente. Y contundencia porque las acusaciones que le llegaron de los bancos morados fueron gruesas.

Imputación preventiva

Habló Fernández de la política de «presunción de culpabilidad» que aplica Podemos, de su estrategia de la «imputación preventiva» que, anotó, ya utilizó con el también socialista José María Pérez en Gijón al hilo de El Musel, y de la paradoja de que considere un privilegio el aforamiento de que también disfruta su diputado Enrique López, inmerso en un proceso judicial. El objetivo, criticó, es «arruinar reputaciones».

El jefe del Ejecutivo subió especialmente el tono al instar a León y su grupo a no parapetarse tras el término 'presunto' cuando siembran sospechas sobre una supuesta financiación irregular del PSOE. Financiación irregular que no existe, aseveró, urgiendo a Podemos a ir de cara si de verdad creen tener pruebas de ello. «Tengan el coraje de retirar ese término, porque inmediatamente tendrán una querella de este partido», clamó.

Respecto del objetivo político de Podemos, Areces, y su presencia o no en las candidaturas del PSOE, Fernández optó por el perfil bajo. Se limitó a opinar que se le antoja «difícil» que se produzca la imputación por el 'caso Renedo' que profetiza León. Y remarcó, como filosofía general, el criterio de que el partido actúa cuando a un cargo se le abre juicio oral, no antes -salvo circunstancias muy excepcionales- ni después. «¿Cuál es el suyo», preguntó a León recordando la tibieza del grupo morado ante episodios polémicos como los protagonizados por Juan Carlos Monedero, Tania Sánchez o la juez Victoria Rosell.

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