La forma de escribir la letra 'g' revelaría datos del comportamiento sexual

Los grafólogos se han puesto de moda últimamente y todo por un estudio en el que hablan sobre el carácter de una persona reflejada en su letra manuscrita y en concreto en los trazos de la letra 'g', determinante, según afirman, para comprender las tendencias sexuales y sentimentales de cada persona.

El óvalo (la cabeza de la letra), representa el yo personal. Si se dibuja grande, significa que su autor necesita ser el protagonista de la pareja, por contra, si se traza pequeño, es un rasgo de anulación y autoestima baja.

El pie (el palito hacia abajo), demuestra la capacidad instintiva. Cuanto más largo, mayor pulsión sexual. Cuanto más pequeño, más inhibición. Quien dibuja el pie terminado en ángulo, es sádico; si lo termina en triángulo es reprimido.

El bucle (la panza), lleva asociada la creatividad sexual. Si el ancho coincide con la medida del óvalo, el autor es capaz de entregar el afecto necesario y equilibrado a la pareja. Si es más ancho, refleja fantasías eróticas y una tendencia a utilizar elementos externos como juguetes, pornografía, etc.

En la unión con la siguiente letra, cuanto más fluido es el trazo con la siguiente letra, mayor será la entrega y mejores serán las relaciones. Si está desligada, hay desconfianza en la pareja.

Si la 'g' parece una 's', existe una clara inmadurez en las relaciones de pareja; si el óvalo está separado del resto, la persona escapa del compromiso. El bucle al revés, que no se une con la letra siguiente, es la renuncia al acto sexual, característico de personas religiosas.

Ahora, todos a escribir 'g'.