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El rastro de 'la manada', también en vídeo

El rastro de 'la manada', también en vídeo

Grabaron siete vídeos con sus móviles en los que se recogía el momento de los supuestos abusos en un portal

ec

Jueves, 19 de enero 2017, 11:02

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Los cinco jóvenes sevillanos que permanecen en prisión desde julio del año pasado acusados de haber agredido sexualmente a una joven durante los sanfermines grabaron siete vídeos con sus móviles en los que se recogía el momento de los supuestos abusos en un portal. De hecho, el contenido de esas grabaciones -en los que se jalean unos a otros y reclaman 'su turno'- han sido claves para mantener en la cárcel a estos cinco individuos, sobre los que también pesa la sospecha de que utilizaron burundanga para cometer ataques anteriores, según informaciones que publica ww.diariovasco.com.

El grupo de sevillanos, entre los que hay un guardia civil y un militar, están acusados de cinco delitos de agresión sexual y uno de robo con violencia. Cuatro de ellos también están imputados por abusar de una joven de 21 años dos meses antes, en Pozoblanco, una pequeña localidad cordobesa. En esa ocasión, como en Pamplona, grabaron la agresión con la cámara del móvil y la compartieron con sus amigos, lo que permitió que el juez la detectara cuando rastreó sus teléfonos con el fin de analizar las imágenes de la agresión de Pamplona.

En las conversaciones de Whatsapp que los jóvenes mantuvieron a través de su grupo de chat, al que llamaban 'la manada', hablaban de llevar sustancias como la burundanga a las fiestas de San Fermín para poder cometer las agresiones sexuales. Las imágenes grabadas en el portal de Pamplona muestran a la víctima, una chica de 18 años, que en ningún momento abre los ojos, no habla, sus movimientos parecen dirigidos y a la que los acusados sujetan del pelo, la nuca y las caderas.

La agresión de Pozoblanco apoya esa sospecha de que utilizaron burundanga. La joven aparece en la parte trasera de un vehículo, está inconsciente, situación que los agresores aprovechan para someterla a tocamientos. El abogado de los procesados trata de que el juez anule los vídeos de la agresión en Pozoblanco con el argumento de que la Policía foral se extralimitó en sus competencias al realizar pesquisas fuera de su ámbito geográfico.

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