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Viernes, 30 de diciembre 2016, 21:14
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Sufre gastroparesia. Una enfermedad desconocida que le provoca mareos, náuseas y dolores de estómago. Además, si comiera, su vida correría peligro. Lily Tock nació 11 semanas antes de tiempo, con problemas para alimentarse desde entonces. Días después, un ataque casi acaba con ella, pero pareció recuperarse y continuó una vida normal con asma y algunos huesos dañados. Fue a los 14 años cuando le detectaron esta grave enfermedad, cuando comenzó a sufrir mareos y nauseas constantes. Desde entonces, es alimentada por vena.
«Me gustaría hacer algo para comer. Es como estar sentada frente a algo que realmente quieres frente a ti, pero no se me permite comérmelo. Es muy difícil, sobre todo en Navidad, que todo gira en torno a la comida y es difícil salir a las comidas con amigos y familiares y sólo poder ver toda la comida agradable», ha contado la joven a DailyMail.
«Trato de evitar mirar comida porque yo sólo quiero comer. Echo de menos la pizza, el pollo, el chocolate, incluso las verduras asadas. Si me lo comiera estaría días vomitando sin poder moverme, con horribles dolores, náuseas y podría correr peligro mi vida». Ahora quiere crear conciencia sobre esta enfermedad en un blog, donde a través de sus historias diarias, muestra su valentía y coraje para luchar.
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