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Las cápsulas de SkyTran.
Así es el transporte del mañana

Así es el transporte del mañana

Vehículos voladores, trenes supersónicos, coches sin conductor... Los líderes de las principales tecnológicas diseñan ya la nueva generación del transporte público

José Antonio González

Domingo, 27 de noviembre 2016, 00:04

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Conducción autónoma y vehículos propulsados por fuentes de energías limpias. En estos dos pilares se basarán los medios de transporte del futuro. ¿La razón? Las previsiones sobre la movilidad de la población obligan a dar con sistemas de transporte que sean sostenibles. Según la Organización de Naciones Unidas (ONU), en 2050 el 70% de los habitantes del planeta vivirán en centros urbanos. El gran aliado en esta carrera es la tecnología. En ella está la clave para seguir creciendo sin agotar los recursos naturales disponibles ni provocar el caos.

Estados Unidos, junto con Japón, lleva la delantera al resto de países en la expansión de las ciudades inteligentes. Este año, el Departamento de Transporte de la Administración Obama ha destinado 165 millones de dólares para el desarrollo de tecnologías de 'smart cities'. De ellos, 100 millones están destinados a impulsar tecnologías avanzadas de transporte en ciudades como Pittsburgh, San Francisco, Houston, Los Ángeles, Buffalo y Marysville.

Mayor autonomía

"La movilidad es complicada, las infraestructuras complejas y el hecho de usar mayoritariamente tecnologías que no requieran conductor en 2020 probablemente esté fuera de nuestro alcance", explica Pat Elizondo, vicepresidente senior de Marketing y Ventas Globales en la división de Sector Público de Xerox, compañía líder en el mercado de sistemas de transporte inteligentes.

Sin embargo, un estudio de Xerox afirma que dos de cada diez ciudadanos encuestados opinan que se desplazarán por las ciudades con un coche autónomo. Precisamente, Estados Unidos es el banco de pruebas de este tipo de vehículos. Sin embargo, los ingenieros más optimistas apuntan a 2021 como la fecha más cercana para ver estos vehículos recorriendo las autopistas. Al menos esta es la apuesta de Ford, Uber y BMW, pero también se suman al banco de pruebas grandes tecnológicas como Google y Tesla.

Uno de los principales escollos para que echen a rodar estos vehículos sigue siendo la burocracia, aunque sus ingenieros han encontrado en Barack Obama un gran aliado. "No estamos hablando del último gadget o aplicación, estamos hablando de mejorar la vida de las personas", comentó este mes en una entrevista al 'Pittsburgh Post-Gazette'.

Cuestión de seguridad

La Asociación Internacional para la Seguridad en la Carretera ha cifrado en más de 37.000 personas que mueren cada año en accidentes de tráfico en Estados Unidos. En España, ya se ha producido la primera gran prueba de un coche autónomo. El pasado año, un vehículo de Citroën recorrió los cerca de 600 kilómetros que separan Vigo de Madrid sin un conductor al volante. Con un sistema de radares y cámaras, que informan de la velocidad y los obstáculos en la calzada, el Citroën Grand C4 Picasso alcanzó la capital española.

Aerotaxis de Uber

  • la apuesta de los visionarios

  • El proyecto no solo consiste en un sistema de transporte aéreo, sino que además incorporaría los avances hallados en el desarrollo de su coche autónomo. No obstante, no es la primera vez que se oye hablar fuera de la ciencia ficción de taxis voladores. Airbus trabaja para que en 2017 echen a volar su coche Skyborne dentro del Proyecto Vahana. Los planes de la aeronáutica europea son para 2030, lejanos del sueño de Uber.

  • El famoso Tren Bala japonés tiene un potencial competidor, el Hyperloop de Elon Musk. El sueño del creador de los coches Tesla cada vez está más cerca de hacerse realidad. Viajar a más de 1.300 kilómetros por hora parece ciencia ficción, pero gracias a una cápsula de aluminio con una capacidad para 30 viajeros intenta hacerlo tangible. Con un sistema de propulsión, los ingenieros de Elon Musk, tratan de desarrollar un sistema de electroimanes que haga flotar en un tubo la cápsula del Hyperloop. Eliminando por complete el rozamiento, este sistema espera alcanzar velocidades de vértigo.

  • Google, Uber, Tesla y todas las grandes marcas de fabricantes de coches ya trabajan en el coche del mañana. Las primeras pruebas con estos vehículos ya son una realidad y no tan lejos. El pasado 2015, Citroën probó entre Vigo y Madrid su dispositivo autónomo. Una carrera que cuenta con el apoyo de Barak Obama, pero que las distintas administraciones aún hacen oídos sordos a las peticiones del sector. La tecnología ya está sobre el asfalto y por detrás los gobiernos que no saben cómo controlar estos vehículos dotados de cámaras y sensores de útima generación.

El carril de la izquierda lo ha tomado Uber, que ha adelantado a sus competidores. La empresa de transporte colaborativo ya ha desplegado en Pittsburgh (Estados Unidos) la primera flota de vehículos totalmente autónomos para satisfacer las necesidades de sus clientes. Mientra , en el otro lado del mundo, la japonesa Toyota se ha propuesto invertir 1.000 millones dólares en inteligencia artificial los próximos cinco años y trabaja para dotar a los Juegos Olímpicos de Tokio de 2020 de vehículos autónomos.

A pesar de las sombras que planean sobre este tipo de vehículos, como los accidentes del Google Car y del Model S de Tesla, los expertos vaticinan que la principal ventaja que traerán es la mejora del tráfico. Los españoles pierden 18 horas de media en atascos, siendo los barceloneses los primeros con 28 horas entre congestión y congestión, según los datos del Informe Anual de Medición del Tráfico 2015 que publica INRIX recogidos por Eurostat.

Por países, Bélgica, Holanda y Alemania dominan la clasificación de mayores atascos en Europa. Sin embargo, la primera posición en largas filas de coches parados la ocupa China. Es por ello que han decidido combatir la congestión 'saltando' el tráfico.

El pasado agosto, la ciudad de Qinhuangdao, al noroeste de China, estrenó el primer autobús elevado del país. El vehículo mide 22 metros de largo, 4,8 de alto y 7,8 de anchura, y tiene capacidad para transportar a 300 pasajeros. Los casi ocho metros de altura permiten al TEB-1 sortear el denso tráfico del gigante asiático. Esta 'elevada' tecnología lleva años siendo estudiada en China, y este primer vehículo todavía no está plenamente preparado para ello, ya que tiene serias dificultades para girar en las curvas. Mirando al cielo o, como canta el recién premiado con el Nobel de Literatura Bob Dylan, "la respuesta amigo está en el viento".

Eso pensaron los padres de skyTran y los fundadores de Uber, Garrett Camp y Travis Kalanick. En el corazón de las oficinas de la NASA en Mountain View (Estados Unidos) y tras varios años de investigación, nace skyTran, una solución "veloz y de alta tecnología para revolucionar el sistema de transporte", explican los creadores en su web. La red de skyTran es un sistema de alta velocidad de bajo coste controlado por un ordenador y que usa la levitación magnética para moverse. "SkyTran tiene acceso a una amplia gama de tecnologías y capacidades de vanguardia. Es capaz de combinar la experiencia de la NASA, los activos y la información con sus propias competencias básicas", añaden. Por su parte, Uber trabaja para que en 2020 sus aerotaxis sobrevuelen las grandes capitales, un proyecto que además incorporaría los avances hallados en el desarrollo de su coche autónomo. No obstante, no es la primera vez que se oye hablar fuera de la ciencia ficción de taxis voladores.

Autobuses 'verdes'

Mientras que todas estas nuevas tecnologías aterrizan o desembarcan en Europa, el Viejo Continente se inclina por los transportes ecológicos. Los combustibles fósiles dejan paso a la electricidad, que cada vez más se apodera de los medios de transporte públicos.

París cuenta desde el verano con el primer autobús autónomo y 100% eléctrico del país vecino. Con capacidad para 12 pasajeros, el pequeño vehículo ya recorre las riberas del Sena a unos 25 kilómetros por hora, aunque a un alto precio para la Administración gala. Cada unidad cuesta 215.000 dólares.

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