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Cartel con la leyenda 5G en el Mobile World Congress en Barcelona.
La revolución del 5G

La revolución del 5G

Internet 5G será una pieza fundamental para la realidad virtual o las smartcities

Michael Mcloughlin

Miércoles, 24 de febrero 2016, 19:37

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Las vacas se conectan a Internet. Al menos en Barcelona. Eso es lo que propone Fujitsu. Se trata de detectar cuándo los animalitos están más felices para ser fecundadas, entre otras cosas. Al año, cada cabeza de ganado puede generar 300 megas de información. Una, de acuerdo, pero imaginen millones de estas criaturas ordeñando las redes móviles el día de mañana.

En 2025 habrá 100.000 millones de conexiones a Internet. De esa cifra estratosférica solo 7.000 millones serán entre personas. El resto, entre usuarios y objetos u objetos que se comuniquen entre sí. Un futuro que obliga a repensar la capacidad y la velocidad a la que viaja la información por la Red. La respuesta la tiene el 5G.

El 5G se postula como un factor de desarrollo social y económico clave. La Unión Europea quiere que sea un realidad estable en 2020. Corea del Sur, por su parte, lo desea para dos años antes, en 2018, cuando celebre los Juegos Olímpicos de Invierno. «Será esencial para el éxito de sectores industriales clave como la automoción, la salud o la industria digital», explica Günther H. Oettingger, comisario europeo para la Sociedad y Economía digital, en el Mobile World Congress de Barcelona.

A día de hoy, el internet móvil de cuarta generación (4G) suele manejar unos 40 megas de media por segundo como velocidad de descarga. En un laboratorio, hasta 200 megas. Sin embargo, el 5G ha alcanzado ya la cifra de 10 gigabytes por segundo en pruebas en entornos controlados. Por si fuera poco, las diferentes investigaciones señalan que podrá soportar una densidad de hasta 100 dispositivos por metro cuadrado.

Realidad virtual, el coche autónomo de Google, la llamada medicina conectada, los ingentes escuadrones de vuelos no tripulados o cada pieza sobre las que se levanten las smartcities. Todas estas revoluciones serán 'amamantadas' por el 5G. «El tema básico es que con las anteriores generaciones -2G, 3G, 4G- hablamos de telefonía móvil», resume Valenti Roca, 'product manager' de Cellnex, una firma móvil que provee soluciones de conectividad y que trabaja, entre otros, con los principales operadores de telecomunicaciones de España e Italia.

«Es una tecnología completamente disruptiva que permitirá que cualquier dispositivo pueda estar conectado a internet», explica Roca, cuya empresa presenta estos días soluciones de banda ancha y conectividad como las 'small cells', que, por ejemplo, buscan asegurar la estabilidad de una red wifi pública cuando tiene a miles de usuarios accediendo a contenidos simultáneamente; sensores para construir las ciudades inteligentes del mañana y otras soluciones basadas en la banda ancha.

«Lo interesante es que no habrá que disponer de una SIM», añade. «¿Qué tiene que ocurrir? Que se fomente el despliegue de estas redes, ultrarrápidas y con muy poca latencia», analiza Roca, que espera que en 2019 estén aprobados los estándares para poder acometer todo el despliegue de dicha infraestructura.

El 5G no deja de recibir elogios. «Será la cuarta revolución industrial», asevera Günther H. Oettingger. César Alierta, presidente de Telefónico, asegura que su incidencia económica será enorme: generará un crecimiento del PIB de hasta el 40%. «Creará una sociedad del gigabit», augura Vittorio Colao, presidente de Vodafone, con quien compartió escenario en la charla inaugural que ofreció el pasado lunes en la primera jornada del MWC.

Por delante quedan muchas preguntas. La llegada de una nueva tecnología conlleva que las firmas responsables de desarrollarlo alcancen acuerdos, den forma a estándares que faciliten su despliegue, permisos y redistribuir el espectro.

Sin embargo, también los hay críticos con esta carrera de velocidades vertiginosas. Mark Zuckerberg, fundador de Facebook, afeó al gremio que no priorizase la expansión de internet a todos los rincones del planeta antes que el desarrollo del 5G.

«La industria no crecerá si los ricos tienen conexión al doble de velocidad que el resto», sostuvo en una conferencia en la que defendió su proyecto filantrópico internet.org. Sin embargo, esta cucharadita de ricino fue compensada con sus palabras sobre una de sus grandes apuestas: Oculus. «El 5G catapultará la realidad virtual», afirmó haciendo referencia a la transmisión de experiencias inversivas en directo. Al 5G aún le quedan muchos pasos por dar y muchos debates por terminar.

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