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CHELO TUYA
Domingo, 20 de septiembre 2009, 11:45
Sumar en la misma frase Cosmen y hotel Robledo puede llevar a pensar que la familia del emporio económico que nació de ALSA está detrás de la operación que convertirá a la tradicional residencia gijonesa en un tres estrellas urbano. Sin embargo, es un sobrino de Pepe Cosmen, Secundino, quien a través de Domus Hoteles, la empresa de gestión hotelera que preside, quien se va a hacer liderar la transformación del Robledo. A pesar de la crisis, afirma Secundino Cosmen que «entrar en Gijón» era su objetivo «prioritario» tras reunir una veintena de hoteles en todo el país.
-En plena crisis, ¿no es una locura asumir la gestión de un hotel?
-Da miedo, porque la crisis asusta, pero hay que arriesgarse, sobre todo si hablamos de entrar en Gijón, que para Domus Hoteles era un objetivo absolutamente prioritario. Además, en este caso es trabajar sobre seguro, porque nosotros no compramos el Hotel Robledo, que seguirá siendo propiedad de la familia Fernández Álvarez. Lo que va a hacer Domus es gestionarlo.
-Y transformarlo, ¿en qué va a consistir el proyecto?
-Evidentemente, el hotel, con ser magnífico, necesita un lavado de cara, con una nueva cafetería, más moderna y acorde a la zona en la que está ubicado, y, sobre todo, dotarlo de wifi gratuita. El Robledo se incluirá en la categoría CityExpress, que son los hoteles funcionales, destinados al viajero de empresa, al de congresos. Por ello, necesita tener buena conexión telefónica y de internet, así como equipos informáticos.
-¿Y el resto del edificio?
-Eso irá en 2010. Evidentemente, necesita reformas en baños y zonas comunes, pero sus 138 habitaciones ya son muy funcionales, por lo que el trabajo no será mucho.
-¿Se puede hablar de dinero?
-Se podría, pero es que no lo sé. Los dueños del establecimiento son expertos en el mundo de la construcción, con lo cual están haciendo sus propios cálculos. No será mucho y, dado que ellos son los que saben, les dejo las cuentas a ellos.
-¿Cuándo será un hotel Domus?
-La placa ya está en la puerta. De hecho, desde hoy ya se puede reservar en la web de domus hoteles. Nosotros ya hemos asumido la gestión, aunque toda la presentación la haremos en octubre.
-¿Seguirá manteniendo las tres estrellas o dará el salto a las cuatro?
-No, no iremos a cuatro. En Gijón ya hay una gran y muy buena oferta en esa gama. Nuestros CityExpress son hoteles de 2 y 3 estrellas, muy funcionales, con todo lo que necesita el viajero, pero sin llegar a los servicios o a los espacios que ya exige un cuatro estrellas.
Entre 40 y 80 euros
-La Mesa de Turismo de Fade acaba de advertir que Asturias no puede bajar más los precios, dada la calidad que ofrece. ¿En qué gama se moverá el nuevo Robledo?
-Nosotros estaremos en un abanico que va desde los 40 a los 80 euros, pero la bajada de tarifas seguirá. Entiendo lo que dice Fade, pero el precio ahora lo pone el cliente y lo hemos visto este verano, cuando se han pagado a 25 euros habitaciones que, hace un año, costaban 125.
-¿Y no era 'atracar' al cliente cobrar 125 euros por la misma habitación que ahora cuesta 25?
-Cobrar 25 euros por una habitación que antes costaba 125 no es robar, es adaptarse. En Asturias no se han aplicado políticas de precios propias de las islas o las costas, donde el cliente se veía como una máquina de hacer dinero. Aquí se ha dado mucha calidad y, si se ha llegado a rebajar tanto el precio ha sido gracias a reducir costes y servicios. Los empresarios asturianos han, hemos, hecho trabajo muy importante de ahorro y de pérdida de rentabilidad durante todo este año.
-A esa pérdida de rentabilidad empresarial se achaca el parón del proyecto de 5 estrellas que AC está llevando a cabo para la Laboral. ¿Le alivia quedar sin competencia?
-Todo lo contrario. Me da mucha pena que AC haya paralizado su proyecto de la Laboral, porque Gijón necesita un cinco estrellas. Para nosotros, jamás será competencia, porque atrae a un cliente que no se alojará en nuestro hotel. Busca, específicamente, lo que da un cinco estrellas. Sin embargo, que Gijón cuente con un cinco estrellas es bueno para todos, ya que da ganancias al resto de los sectores.
-Antonio Catalán asegura que continuará la obra, pero no pone fecha de inicio, más que el año: 2010. ¿Nos fiamos?
-Si de algo estoy seguro es que Antonio Catalán cumplirá su palabra. Trabajé con él cuando estaba en NH, la primera cadena que fundó, y no tengo más que buenas palabras. Es un monstruo de los negocios y lo sabe todo de hoteles. Sé que tiene un cariño especial al proyecto de la Laboral y, aunque no lo tuviera, un proyecto que inicia lo acaba. Yo no tengo ninguna duda de que habrá hotel.
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