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Un trabajador de Juliana pasea por el dique del astillero, junto al buque cementero en construcción. :: CITOULA
El hundimiento de Juliana
ECONOMÍA

El hundimiento de Juliana

Cómo una empresa rentable puede acumular 60 millones de deuda en 30 meses es sólo una de las múltiples incógnitas sobre Juliana por despejar Los incumplimientos de Vulcano y problemas de financiación echaron a pique al astillero

ENRIQUE ARENAS Eblarenas@elcomerciodigital.com

Miércoles, 2 de diciembre 2009, 03:36

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1.-¿Por qué se privatiza Juliana?

Tras desaparecer el Instituto Nacional de Industria (INI) en el año 1995 e integrarse en la Agencia Industrial del Estado, el grupo Astilleros Españoles, en el que está incluida Juliana, pasa a depender de la Sociedad Española de Participaciones Industriales (SEPI). En marzo de 2001, se produce la fusión de los astilleros civiles y los militares (Astilleros Españoles y Bazán) y nace el grupo IZAR, al que se incorpora Juliana, con el nombre de Izar Gijón. Tras recibir importantes ayudas de fondos europeos para inversiones en el astillero gijonés (se calcula que fueron unos 30 millones de euros), la Unión Europea obligó a poner en marcha la privatización de los astilleros españoles. Se salvan de esta medida los astilleros militares, que son incluidos en Navantia. La comunidad andaluza, sin embargo, logra evitar la privatización de los astilleros de Huelva. Izar Gijón, Izar Sevilla, Sestao y la fábrica de motores de Manises se ven abocados inevitablemente a la privatización. El 18 de julio de 2006 la SEPI decidió vender Izar Gijón a la compañía viguesa Vulcano por 2.089.200 euros y pasó a denominarse Factorías Juliana. El propietario de Vulcano, Fernando Santodomingo, dejó fuera de esta operación a su socio Barreras y éste decidió entonces presentar una denuncia, en la que solicitó el 50% de las acciones de Juliana. Ganó en primera instancia, pero la sentencia fue recurrida.

2.-¿Por qué Vulcano se adjudicó el astillero gijonés?

Dos empresas llegaron a la recta final del proceso de adjudicación abierto por la SEPI para privatizar el astillero gijonés: Construcciones Navales del Norte (CNN) y Factorías Vulcano. Los trabajadores se opusieron a la privatización, pero entre las dos opciones se inclinaron por la vasca, que estaba presidida por el ingeniero asturiano, José Luis Álvarez. La SEPI optó por adjudicar a CNN el astillero La Naval, de Sestao, e Izar Gijón a Vulcano. Un informe de la empresa Boston Consulting parece que inclinó la balanza en la adjudicación de Juliana hacia Vulcano. La carga de trabajo que presentó la empresa gallega y el que se hiciera cargo de toda la plantilla del astillero también estuvo en el fondo de la decisión. Los trabajadores no se fiaban de Vulcano, que acababa de salir de un proceso concursal. Lograron de la SEPI la cláusula de salvaguarda para garantizar sus puestos de trabajo en caso de cierre, como así ocurrió.

3.-¿Cuándo se produjeron los primeros problemas?

Poco tiempo después de hacerse cargo de Juliana, Vulcano, que en su plan industrial preveía la construcción de cuatro buques quimiqueros en Gijón, decidió modificar la carga de trabajo. Juliana recibió entonces el encargo de construir cuatro buques sísmicos, más complicados técnicamente. El personal de Juliana siempre se quejó de defectos en los proyectos y, según parece, Vulcano se pilló los dedos en lo que se refiere a presupuestos y plazos de entrega. Poco después de iniciar los trabajos ya se sabía que los buques iban a dejar pérdidas.

4.-¿Cuándo empezaron los problemas con los trabajadores?

A partir del segundo semestre de 2008 comenzaron las dificultades con la plantilla de trabajadores del astillero. El comité de empresa, en un documento fechado el 31 de octubre de ese año, comunicó a la empresa la suspensión de su «colaboración» pasando a hacer la jornada prevista en el convenio, de 7 a 14,45 horas, sin turnos ni horas de flexibilidad, aduciendo falta de pago a empresas auxiliares y proveedores, falta de materiales y mala gestión. La empresa achacó a la plantilla y al comité de empresa falta de compromiso con el trabajo y el futuro de Juliana que, según dijo, estaba motivado por el acuerdo con la SEPI para la extinción de contratos y prejubilación a los mayores de 50 años, recolocaciones y bajas incentivadas en el caso del cierre.

5-¿La crisis económica agravó la situación?

No fue la crisis económica la que influyo de forma más decisiva en la marcha de Juliana. Precisamente, durante los meses de mayor endeudamiento de la empresa gijonesa, todos los astilleros tenían abundante carga de trabajo motivada por los pedidos de años anteriores. Será especialmente a partir de ahora cuando se espera que los astilleros empiecen a sufrir la crisis económica en sus carnes, ya que los pedidos no llegan desde hace dos años y la carga de trabajo se acaba.

6.-¿Por qué una empresa con beneficios pierde 60 millones de euros en sólo 30 meses tras su privatización?

Es la pregunta más difícil de responder. Según parece, la deficiente valoración de los proyectos y su adjudicación al armador noruego Petroleum Geo Services en un precio y un plazo de ejecución poco realistas produjeron los primeros desfases económicos. La falta de financiación para los buques fue también un duro golpe para la supervivencia. Los sindicatos achacaron a Vulcano falta de interés.

7.-¿Por qué se llega al proceso concursal?

Juliana no tuvo más remedio que presentar ante el Juzgado de lo Mercantil de Oviedo un proceso concursal por las importantes deudas que había acumulado. Inició el concurso de acreedores voluntario el día 29 del pasado mes de mayo y en aquel momento Juliana presentó un pasivo concursal por importe de 61.528.862,11 euros, según el informe provisional que reflejaron los administradores. También señalaron que se deben tener en cuenta los contingentes, que podrían elevar esa deuda en 150.620.786,82 euros, y los créditos contra la masa. Juliana valoró sus activos (terrenos, construcciones e instalaciones) en 81.824.692,17 euros.

8.-¿Cuánto puede durar el proceso concursal?

Tras presentar los administradores concursales su informe, el proceso se encuentra ahora en la fase de alegaciones y se deberán afrontar 18 juicios por demandas presentadas por acreedores que no están conformes con el informe. Posteriormente, se procederá a convocar una junta general de acreedores y si hay un convenio, tras establecer quitas y esperas, la empresa seguirá funcionado. De lo contrario, se procederá a su liquidación. Se cree que el proceso se prolongará hasta septiembre de 2010

9.-¿Tiene futuro la empresa? Todo dependerá de si se produce un acuerdo con los acreedores en la fase de convenio del proceso concursal. Si el 51% de la deuda de las empresas acreedoras se pone de acuerdo habrá convenio y se establecerán las condiciones necesarias para el pago, cantidades y periodo de tiempo en que se satisfará la deuda. En la actualidad se está hablando de una quita de más del 33%, que podría llegar hasta el 50%. En este proceso debería entrar en juego el nuevo accionista, si lo hubiera, que propondrá al juez un plan industrial para reflotar la empresa. Aquí estará la clave para que el magistrado acceda a que el concurso sea positivo y se salve Juliana.

10-¿La Administración hizo lo suficiente para salvar Juliana?

Los sindicatos fueron muy críticos con el Gobierno del Principado, al que acusaron de no hacer lo suficiente para evitar la privatización del astillero, en un primer momento, y de no oponerse a la adjudicación a Vulcano. CC OO opinó que a la Administración no le gusta el sector naval por ser muy reivindicativo y UGT cree que el Principado apostó poco por Juliana.

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