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RAFA BALBUENA
Miércoles, 30 de diciembre 2009, 04:31
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La despedida de año tuvo sonido de piano en la Casa de Cultura. El concierto que protagonizó ayer Noelia Rodiles en el auditorio registró el lleno de las grandes ocasiones, y el patio de butacas colmó de aplausos a la intérprete por su maestría a la hora de tocar obras de Liszt, Mozart y, muy especialmente, de Isaac Albéniz.
Las composiciones del músico catalán fueron objeto de la segunda parte del recital, formada íntegramente por piezas suyas, conmemorando así el centenario de su muerte, que se cumplió en este 2009 que ahora dice adiós.
El evento, promovido conjuntamente por la Filarmónica Avilesina y la Sociedad Económica de Amigos del País, supone asimismo la conclusión cultural del año en la ciudad. Así, tras el concierto tuvo lugar un brindis con cava para festejar la colaboración de ambas entidades y saludar un 2010 que, según los deseos de Amigos del País, prevé más iniciativas musicales de este tipo.
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