Las familias dejan de pedir la ayuda de la dependencia por los retrasos y el copago

Asturias lidera la tasa de discapacidad con 140.000 casos, de los que apenas un 12,6% (17.690) han superado ya todos los trámites marcados por la Ley de Dependencia para lograr que se les reconozca el derecho a percibir una ayuda. Hay, por tanto, muchas familias todavía por incorporar al sistema y, a pesar de ello, las peticiones están cayendo en picado. En 2007 las administraciones tramitaban 54 solicitudes al día y este año despachan menos de 10.

¿A qué se debe este fenómeno? ¿Por qué las familias con dependientes a su cargo piden cada vez menos el auxilio de la Administración? «Los recortes en la ayuda, la obligación de pagar parte de la atención y la tardanza en los cobros están causando muchas quejas», valora Sila Murillo, de la Asociación de Mujeres Discapacitadas de Asturias (Amdas) La Fonte.

«No es que estemos ya todos atendidos ni que exista desconocimiento; las familias tienen cada vez mejor información, es el papeleo y las rigideces lo que les echan para atrás», lamenta Concha Meana, de la Asociación Asturiana de Familias con Alzheimer (Adafa). A pesar de todo ambas instan a los usuarios a «pelear por sus derechos; costó conseguirlos y si el sistema funciona mal habrá que protestar, pero no prescindir de él».

La Ley de la Dependencia «es un caramelo que cuando lo abres ves que sólo tenía el envoltorio», resume Meana. Su asociación lleva casi un año sin tramitar una petición, cuando antes «eran 20 al mes». Son 20.000 las personas diagnosticadas con alzheimer en Asturias y «todos los días desde todos los hospitales hay que añadir pacientes a los que se diagnostica como posibles nuevos enfermos», indica la presidenta de Adafa. El perfil más repetido es el de «enfermo de 82 años que está al cargo de su mujer o esposo, que ronda la misma edad; como comprenderás, a esas alturas ponerse a tramitar una ayuda que tarda tanto en llegar desalienta mucho a la gente», indica Meana.

El último informe realizado por el Tribunal de Cuentas aseguraba que entre el 1 de enero de 2011 y el 30 de abril de 2013 el tiempo medio para tramitar la concesión de la ayuda se había disparado en Asturias hasta los 475 días, la mayor demora del país. «Hay familias que te dicen que para qué la van a pedir, que si les tarda tanto, cuando llegue la paga el dependiente ya está criando margaritas», señala la presidenta de Adafa.

A los retrasos se suma el aumento del copago y la rigidez de la prestación que ofrece. «Tenemos casos en los que el cuidador sólo te puede venir a levantar al enfermo a las nueve de la mañana, cuando así el día se le hace muy largo y además a ti no te viene bien», expone Meana. La solución a la que recurren las familias «es la de contratar a la vecina, prima o amiga, o la que pone el cartel de 'señora se ofrece para cuidar a persona mayor', a la economía sumergida».