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Jueves, 14 de julio 2016, 02:07
33 minutos. Esa fue la antelación con la que el lunes fue advertido un vecino de Gijón de que su cita en Neurología, en el centro de salud de Puerta de la Villa, quedaba suspendida. Sin ninguna explicación más. Alfredo Fernández se encontraba ya en el centro sanitario cuando recibió la llamada advirtiéndole de la cancelación de la consulta. Una consulta por la que llevaba esperando tres meses y por la que ahora deberá aguardar otros tres meses más, hasta el 5 de octubre. El aplazamiento no fue, sin embargo, el único incidente del día. Tanto o más le molestó que hasta en dos ocasiones le negaran un justificante laboral argumentando que «no había sido atendido por el médico» y que, además, «me habían avisado con el suficiente tiempo». «¿33 minutos es suficiente?», se pregunta.
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