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El 63,2% de los 6.162 inscritos opositaron al Sespa en busca de estabilidad laboral
Durante las pruebas celebradas en Gijón, tres examinados requirieron asistencia médica y uno debió ser trasladado al Hospital de Cabueñes
P.ALONSO
GIJÓN.
Lunes, 2 de diciembre 2019, 02:45
Veteranas con años de servicio pero sin estabilidad, jóvenes con apenas experiencia y profesionales de otros sectores para los que trabajar en la administración pública significaría dar un salto de calidad en el empleo. Son algunos de los perfiles de los 3.890 opositores, un 63,2% de los 6.162 inscritos, que ayer se congregaron en el Recinto Ferial Luis Adaro para participar en las pruebas de selección de 166 plazas de personal estatutario y de servicios del Sespa en las categorías de técnico especialista de Laboratorio, Radiodiagnóstico, Anatomía Patológica y pinche.
A sus 56 años, 31 de ellos trabajando como técnico de Laboratorio en el HUCA, Pilar Granados oposita, al igual que otras 923 personas, a uno de los 58 puestos de su categoría. «Ilusión de sacar plaza no la tengo como antes, pero hay que venir», admitió, consciente de la dificultad de obtenerla a pesar de los puntos acumulados. En su misma situación se encuentran Rocío Romay, Montserrat Junco , María José Villanueva, con 19, 18 y 15 años de experiencia respectivamente en laboratorio, pero sin plaza. Ayer también acudieron al examen. «Tranquilas y sin nervios».
Todo lo contrario que Verónica Piedra, una joven de 25 años para quien la de ayer era su primera oposición. «Me subo por las paredes», admitó esta opositora a técnico de Laboratorio que apenas ha trabajado en su especialidad, al igual que Patricia Alonso, que se presentó con la «esperanza de aprobar la primera oposición que hago en mi vida, con eso me doy por satisfecha».
Otros opositores en cambio repiten experiencia. Victoria Menéndez ya se presentó a la prueba de celador, el pasado mes de marzo, y «como parte del temario era igual y me gusta cocinar», se decidió. En esa ocasión ella aprobó. A Daniel García le faltó poco, por lo que decidió intentarlo como pinche. «Esta vez voy a aprobar», vaticinó.
Trabajar para la administración es una opción más, tanto para quienes buscan trabajo, como para quienes aspiran a una mejora del empleo, como Sandra Menéndez, que trata de cambiar su actual sector, el del comercio, por otro tipo de puesto que le permita conciliar.
No obstante, la prueba también contó con profesionales de los fogones como Rocío López, que trabaja como cocinera en un centro de día en Ávila, aunque su «ilusión» es obtener plaza en Asturias, y Óscar Suárez, que trabaja como cocinero en el Ministerio de Defensa.
La de pinche fue la convocatoria que más opositores congregó, con 1.695 para un total de 40 plazas, aunque también fue la que menos porcentaje alcanzó en relación a los inscritos iniciales, que fueron 2.945.
La prueba de técnicos especialista en radiodiagnóstico fue la segunda en asistencia y la primera en en porcentaje, con un 69,72%. Lo que significa que de las 1.526 personas que abonaron la tasa de examen, 1.064 acudieron ayer a la cita para sacar una de las 58 plazas.
Entre ellas, muchos aspirantes de otras comunidades como Galicia, Madrid o Castilla y León. Tanto esta última como la capital han celebrado recientemente convocatorias de esta especialidad, lo que ha hecho que muchos profesionales hayan decidido presentarse también en Asturias, como Ylenia Jorge, del Hospital de la Paz, o la palentina Sandra Pozo, que trabaja de forma temporal en el hospital Río Carrión.
Cierra el ránking de asistencia la prueba de técnico de Laboratorio, con 924 participantes, de los 1.354 inscritos y Anatomía Patológica, con 207 opositores, de los 342 inscritos para un total de 10 plazas.
Cinco pabellones
Las pruebas arrancaron pasadas las 11. Antes, el grueso de los participantes ocupaban ya los cinco pabellones habilitados. Hasta ahí la jornada transcurrió con normalidad y sólo caben destacar episodios anecdóticos, como la pérdida de una carteara con la documentación de una opositora, que finalmente apareció, o el intento de una aspirante a acceder al recinto acompañada de su madre, que no poseía acreditación.
No obstante, con el examen ya iniciado, el equipo médico presente debió asistir a tres personas por ataques de ansiedad, según informaron fuentes de la Consejería de Salud. Una de ellas fue trasladada al Hospital de Cabueñes.
Asimismo, hubo opositores que se quejaron del frío en el interior de las aulas y otros advirtieron de la falta de espacio entre los aspirantes, que se enfrentaron a preguntas como ¿cuántas cisuras tiene el pulmón izquierdo? ¿qué tipo de tubo de extracción es el indicado para una prueba de paludismo? o ¿qué es el clostridium perfringens? En general, los opositores consideraron que las pruebas fueron «asequibles», «incluso fáciles si habías estudiado». Aunque hay quien vio alguna pregunta «enrevesada» y respuestas ambiguas. En el examen de pinche se anularon dos preguntas.
Así, son muchos los que salieron de las pruebas convencidos de que van a aprobar, aunque lo de «sacar plaza ya es más difícil».