Asturias registró más de 150 alertas alimentarias en los últimos cinco años
El Principado llevó a cabo más de 170 actuaciones para afrontar estas alarmas, en las que se vieron implicados 904 productos
LUCÍA R. LORENZO
GIJÓN.
Martes, 3 de septiembre 2019, 01:09
El brote de listerioris en Andalucía y la alerta lanzada el pasado 9 de agosto tras la detección de toxina botulínica en una lata de atún elaborada en Galicia y comercializada por DIA han puesto el foco sobre el sistema de alertas del que disponen las administraciones para evitar intoxicaciones y problemas de salud entre la población. En Asturias, solo en 2019 se registraron 32 de las 200 que hubo en España.
Pero estas no han sido las únicas alertas activadas en el país y la región. En los últimos cinco años, Asturias contabilizó un total de 177 alarmas de las 1.106 registradas a nivel nacional, según datos aportados a EL COMERCIO por la Agencia de Sanidad Ambiental y Consumo. En esta cifra se incluye el caso de la lata de atún pero no el brote de listeria originado en Andalucía porque el lote de productos afectados «no se distribuyó en la región», indicó el jefe de Riesgos Ambientales y Alimentarios de la Agencia de Sanidad Ambiental y Consumo, José Altolaguirre.
En el caso de que Asturias tenga que hacer frente a hipotéticas alertas sanitarias como la vivida en la comunidad andaluza, la región dispone desde 2016 de un 'gabinete de crisis' llamado Comité de Gestión de Emergencias Alimentarias y de Sanidad Animal. Pero, hasta ahora, «no ha sido necesario activarlo», indicó Altolaguirre. Según dicho responsable, la misión del servicio que dirige es proteger la salud de los consumidores en relación con riesgos alimentarios y ambientales, además de controlar a las empresas alimentarias.
En Asturias, entre 2015 y 2018 se activaron 145 alertas alimentarias y se practicaron 168 actuaciones. Entre ellas, la inmovilización cautelar de productos (84). También se centralizaron 70 productos, distribuidos previamente, en un almacén para su control. En 11 ocasiones se requisó y destruyó mercancía por estar prohibida y, por último, se procedió en tres situaciones a reetiquetar alimentos porque, por ejemplo, contenían gluten y en la etiqueta no aparecía esa información.
Altolaguirre indica que alguna de estas alertas «son tremendamente complejas» y requieren de actuaciones que implican a todas las unidades territoriales de la Agencia Ambiental de Sanidad Ambiental y Consumo. Estas acciones sirven para «comprobar la trazabilidad de las partidas, ordenar la retirada del mercado y la toma de muestras», dijo.
Los principales protagonistas de estas alertas son los productos de origen animal (485 en total), entre los que se encuentra carne, pescado, leche y huevos. Le siguen los de origen vegetal (296), con hortalizas, verduras y frutas, principalmente. Por último, se contabilizaron 123 correspondientes a otros productos, entre los que engloban los procesados y los complementos alimenticios.