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Lunes, 12 de mayo 2025, 17:19
En un momento donde la incertidumbre económica ahoga a miles de familias, Cerciora ha conseguido lo que parecía imposible: borrar más de 40 millones de euros en deudas para más de 600 personas en toda España. No es magia. Es Ley. Y sobre todo, es compromiso humano.
Historias como la de Vicente, en Valencia, que heredó el negocio familiar de artes gráficas, pero la pandemia y la morosidad de sus clientes lo arrastraron al cierre. Acumuló más de 49.000 euros de deuda. Hoy, gracias a la Ley de Segunda Oportunidad, esa cifra es cero.
O la de Milagros, en Salamanca, que tras sufrir dos accidentes de tráfico y perder sus vehículos, quedó atrapada en una espiral de reclamaciones por parte de las financieras. 20.000 euros de deuda que hoy ya no existen.
Y también Samuel, de Alicante. Avaló una empresa de material deportivo y acabó perdiendo dos viviendas y acumulando una deuda de 350.000 euros. Ahora, tras su proceso con Cerciora, ha recuperado no solo la estabilidad, sino también la dignidad.
Un modelo pionero y un equipo con alma
Al frente del proyecto hay un equipo de profesionales comprometidos, liderados por especialistas en derecho financiero y personas que han vivido en primera persona el peso de las deudas. Cerciora nació para derribar los muros del sistema y acercar soluciones reales a quienes más lo necesitan.
No vendemos humo. Aquí no hay trucos. Aplicamos la ley con el máximo rigor, ética y corazón. Porque cada caso es una vida. Y cada deuda cancelada, un nuevo comienzo.
Más que una empresa, una causa
Cerciora ha sido reconocida con premios nacionales y europeos por su modelo innovador y su impacto social. Y lo más importante: ha devuelto la esperanza a personas que creían que su situación no tenía salida.
Nuestros clientes pueden contar su experiencia en primera persona. Sus testimonios están disponibles en Google, en nuestras redes sociales y en nuestro canal de YouTube. Porque no hay mejor prueba que la realidad de quienes ya empezaron de cero.
Porque sí, empezar de cero es posible.
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