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e. c / Marco menéndez
Martes, 10 de diciembre 2019, 11:27
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Los tripulantes que han podido regresar al 'Arklow Day' después de que fueran atendidos en el Hospital de Jove por las heridas sufridas por un golpe de mar cuando salían del puerto de Avilés, aseguraron a EL COMERCIO que «estamos bien». La tripulación solo dijo eso con una señal del dedo pulgar hacia arriba, ya que los responsables del buque irlandés no les permitían hacer más declaraciones.
Parte de la tripulación estaba esta mañana, en los muelles de la ampliación de El Musel, reparando los desperfectos causados en el barco por una gran ola solitaria que barrió a cinco personas causándoles diversas heridas y cortes, y que tuvieron que ser evacuados anoche por el Helimer Cantábrico. Dos de los cinco heridos permanecen aún hospitalizados: uno en el HUCA, para cirugía plastica, y otro en Cabueñes, para una cirugía de trauma. Los daños en el barco se limitan a barandillas dobladas, una jaula de izado con barrotes rotos y una escalerilla doblada.
Mientras unos tripulantes se afanaban en reparar esos desperfectos, el resto de la tripulación preparaba el buque para el embarque de un cargamento de clínquer.
El intenso temporal que azotó ayer la costa asturiana acabó por provocar un grave accidente marítimo en plena noche. Las olas, que llegaron a alcanzar los nueve metros en la costa asturiana, provocaron el colapso de un mercante frente a la costa de Avilés pasadas las diez y media de la noche, poco después de salir del puerto. A esa hora, el capitán del mercante de bandera irlandesa 'Arklow Day' se puso en contacto con los servicios de rescate para comunicar que cinco de sus hombres se encontraban heridos de diversa consideración. El golpe de una ola enorme destrozó parte de la cubierta y entró en el cuarto donde estaban reunidos las cinco víctimas, cuatro de ellos de nacionalidad filipina y uno de Ucrania.
Inmediatamente, la torre envió al helicóptero Helimer Cantábrico en su ayuda. El helicóptero y parte de sus efectivos se encontraban hasta poco antes en un ejercicio de entrenamiento. Sin embargo, la urgencia de la operación llevó al equipo a intervenir de inmediato en el salvamento. Durante dos horas, el equipo de rescate luchó contra el intenso oleaje y la complejidad que exigió un peligroso rescate.
Finalmente, los cinco tripulantes heridos pudieron ser trasladados a diversos centros sanitarios. Presentaban numerosas heridas por todo el cuerpo por las piezas metálicas que les habían golpeado durante el accidente dentro del buque. El herido de mayor consideración tuvo que ser trasladado al HUCA, tres se derivaron al Hospital de Jove y otro más al de Cabueñes. Tres de ellos ya han recibido el alta.
La embarcación con bandera irlandesa, de 132,5 metros de eslora y cinco de calado, fue construido en 2011 y cuenta con una capacidad para 11.000 toneladas. Una vez que atracó en los muelles de Arcelor, la consignataria Algeposa se encargó de descargar el slabs que transportaba con destino a la factoría de Avilés. El barco salió del puerto avilesino pasadas las 21 horas de la noche.
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