«Nos han hundido la campaña de Navidad», dicen los comerciantes

No quieren cerrar. Los propietarios de comercios considerados 'no esenciales' se niegan a bajar sus persianas desde mañana, tal y como ha decretado el Gobierno regional para frenar la pandemia del coronarias. De hecho, tienen dudas de que el Principado tenga competencias para fijar el cese de su actividad. Tanto es así que los asesores jurídicos no descartan emprender acciones legales si el Gobierno regional no acepta su petición: «pasar a la fase 1». Es decir, que se permita la apertura de los locales de menos de 300 metros cuadrados y se limite su aforo al 50%.

Eso es lo que la Unión de Comerciantes del Principado ha transmitido al presidente de la Federación Asturiana de Empresarios (farde). Será Belarmino Feito quien lleve hoy sus propuestas, así como las del sector turístico, al encuentro que mantendrá con el vicepresidente del gobierno regional, Juan Cofiño, y con la consejera de Cultura Política Llingüística y Turismo, Berta Piñán.

Según explicó la gerente de la Unión de Comerciantes del Principado, Carmen Moreno, «los empresarios del comercio asturiano están convencidos de que esto supone hundir la Navidad y están enfadados porque ellos no han tenido ni un solo brote».

En esa línea, asegura que «el sector ha cumplido con todas las normas marcadas de forma escrupulosa. Se controla la limpieza y el uso de mascarillas. La prueba de lo que digo está en las estadísticas: no ha habido ningún contagio vinculado al comercio asturiano».

Recuerda Carmen Moreno que «estamos hablando de 17.000 empleos en riesgo», ya que «después del confinamiento de marzo, la campaña de Navidad iba a ser un gran salvavidas para unas empresas que lo están pasando muy mal».

Por ese motivo, pelearán hoy «para que nos permitan seguir abiertos. No tiene ningún sentido cerrar todos los negocios en Asturias, especialmente cuando, volviendo a la fase 1, se garantiza aún más la seguridad», insistió la gerente de la entidad.

En caso de que el Ejecutivo de Adrián Barbón se mantenga en su posición y que los servicios jurídicos no encuentren una vía legal para paralizarla, desde la Unión de Comerciantes del Principado tienen claro que los empresarios necesitan «ayudas». Para garantizar los empleos y la «supervivencia de ellos mismos». Recuerdan que en la primera fase hubo una ayuda de 900 euros, «pero es necesario revisar los gastos que no se pueden cubrir con otro cierre».