«Medidas serias sí, pero no absurdas»
Los hosteleros gijoneses ven «surrealista» la prórroga de restricciones en sus negocios. «Esto es una criba del 'sálvese quien pueda'», lamentan
NATALIA VIVAR
GIJÓN.
Sábado, 20 de febrero 2021, 02:48
Dos semanas más. Las restricciones que afectan tanto al comercio y la hostelería vuelven a ser un jarro de agua fría para ambos sectores. La Consejería de Salud ha decidido prorrogar las medidas especiales incluidas en el nivel 4+ por riesgo extremo para el concejo de Gijón. Ante esta noticia, la crispación de los hosteleros aumenta. Califican de «surrealista» la situación actual y piden «que se reduzcan o eliminen los créditos e impuestos» que suman sus negocios abiertos a medio gas. «Medidas serias, sí, pero absurdas, no», criticó ayer Damaris Vega, de Twist Vegetal.
Su resignación deriva de la «incongruencia» que supone, a su juicio, no restringir la afluencia en algunos puntos de la ciudad, así como en los autobuses. «No se está aplicando el mismo endurecimiento en estos lugares», reclama Vega, que cree que hay más «riesgo de contagio en reuniones privadas», pues, según ha podido observar, «las personas se relajan en esos ambientes y terminan quitándose la mascarilla, a pesar de exponerse al virus». Con ello, exige que «haya soluciones reales». «Si no nos dan ayudas, al menos que nos dejen margen en las calzadas para instalar un mayor número de mesas», insta la hostelera, que actualmente abre su negocio con cuatro mesas en el exterior. Vega añadió una queja que es común en el sector: «Si todos ponemos un poco de nuestra parte saldremos adelante, pero no con estas restricciones que nos ahogan. Esa no es la solución».
En esa misma línea se mantiene María Luisa Acera, de La Casona, quien prefiere «un cierre voluntario» de su restaurante. Pues el tiempo es «totalmente aleatorio» y los días en que puede abrir la terraza «igualmente no compensa», lamenta Acera. «Al final, sin comidas, sin cenas y cerrando a las ocho de la tarde, no facturo ni para pagar la luz del establecimiento», asegura.
«Era de esperar». Este es el sentir de Sergio Ruiz, de Sixty 60, que lamenta a su vez la situación precaria de otros sectores como el ocio nocturno. «Están arruinando a todo un sector. Si nos obligan a cerrar, ¿quién no va a tener deudas?», reprochó Ruiz ante la nueva decisión de prorrogar el cierre. «Todas las promesas que nos trasladan las administraciones en forma de ayudas terminan siendo una mentira. No podemos esperar más», recalcó.
Encierro en San José
Tono Permuy y David Tejerina cumplieron ayer una semana de encierro en la iglesia de San José. Ambos organizaron un acto simbólico al que acudieron casi un centenar de personas. Un apoyo que llamaron «esperanza». «Estamos consiguiendo el objetivo de este encierro: visualizar la situación acuciante que atraviesa no solo el sector de la hostelería», explicó Tejerina en el acto. Lo que secundó Permuy y añadió que su lucha «no es en contra de las medidas que amparan la salud pública». Insisten que no les parece «correcto que con cada cierre no haya unas ayudas urgentes». Recalcan, además, que «el Ayuntamiento solo está enrocado con los bonos de consumo».