Las familias de los usuarios del centro de integración de Pando se movilizan para lograr fondos

Sin una subida en la aportación regional es imposible cubrir la ratio profesor-alumno ya que es imprescindible contratar, al menos, a una auxiliar educadora y a una psicóloga. Son los familiares y el profesorados los que llevan años contratando «los meses que podemos» los servicios de un psicólogo. «Vendemos lotería, calendarios y, ahora, bolígrafos para poder pagar un servicio que creemos que por ley nos pertenece». Además el Ayuntamiento de Langreo realiza aportaciones para poder realizar, entre otras iniciativas, talleres. Al menos destinará unos 21.000 euros.

Este año el convenio entre Servicios Sociales y Ayuntamiento está pendiente de rubricarse, ante una nueva cláusula que se considera «abusiva y engañosa». El Principado pretende que «el Ayuntamiento se comprometa en el convenio a hacer frente al total de las obligaciones derivadas del convenio. Es decir, que si no llega el dinero, que ponga más. Es como quitarse su obligación de un plumazo», sostienen los padres. Así las cosas, el 20 de febrero a las doce del mediodía «nos concentraremos en la consejería para pedir un convenio justo y que se descongele la aportación.

Además recuerdan que la falta de personal es un problema que se arrastra al menos desde 2013. Entonces el centro estaba al 100% de ocupación con 75 alumnos. Se necesitaban tres nuevos educadores. Nunca se contrataron. Ocho alumnos mayores de 65 años fueron ubicados en el Centro de Integración de Riaño, al que este año acude uno nuevo, y Pando solo admitió a una alumna. Actualmente están cubiertas 62 plazas, con niños en espera que no pueden acudir por incumplirse la ratio profesor-alumno.