La demora en las intervenciones de cáncer de pulmón duplica el plazo fijado en los protocolos

Tras el chaparrón de estos días, Emilio Esteban llegó ayer ante los periodistas sin paraguas. Muy didáctico, aseguró que «en nuestro departamento la lista de espera es cero» y quiso enviar «un mensaje de tranquilidad» a los afectados por el colapso del servicio de referencia, es decir, el único en la red pública asturiana.

Esteban pidió que «los asturianos confíen en el sistema sanitario. Estamos todos implicados», y resaltó que «conozco a los profesionales y sé que su máximo compromiso es estar cumpliendo las expectativas que marcan las guías terapéuticas».

Sin embargo, los plazos de las normas médicas entre la detección del cáncer y su tratamiento (ya sea cirugía, quimioterapia, radioterapia o inmunoterapia), chocan con la realidad. «Los plazos que marcan las guías terapéuticas son entre cuatro y seis semanas». A los 56 pacientes que en junio acudieron al servicio de Cirugía Torácica les dieron de plazo mínimo para intervención 12 semanas. El doble de lo que marcan los protocolos.

Pese a que insistió en que «no es lo mismo un cáncer en estadío I (bajo) que el II (intermedio) o el III (alto), cada caso es diferente», reconoció que la demora que sufre Cirugía Torácica «no está dentro del protocolo». Pero abundó que sobrepasar esas seis semanas de plazo que marcan las normas, no implica graves problemas. «Las estadísticas nos dicen que no hay grandes cambios en lo que podamos estar haciendo respecto a una supervivencia o a las posibilidades de curación».

A partir de ahí, pocas concreciones más pudo ofrecer. Consultado sobre la demora en Cirugía Torácica, su respuesta fue «lo desconozco». Preguntado si la demora puede llegar porque ese servicio ha pasado de tres a dos quirófanos: «Esa respuesta la puede dar mejor que yo la gerencia o los responsables del hospital», aunque precisó que «no se toman decisiones de una forma unilateral para que se perjudique a las personas». Y sobre si en el comité interdisciplinar que trata todos los casos de cáncer, Cirugía Torácica había pedido ayuda por su demora: «No tengo ninguna noción de que esto pueda ser así».

Sí apuntó que la gran demanda que está registrando ese servicio (pasó de 16 casos en enero de 2023 a los 56 de junio pasado) puede estar relacionada «con el envejecimiento de la población», tasa en la que Asturias lidera y que «hemos adelantado en detección precoz».

Que los resultados de la rueda de prensa no fueron los esperados quedó patente con el mensaje vespertino de la Consejería de Salud. Adelantó las estadísticas de listas de espera (que publican el día 20 de cada mes) de julio e, incluso, hizo una aproximación de lo ocurrido hasta el 5 de agosto.

Así, de los 56 pacientes que en junio esperaban 88 días para operar, en junio bajó a 45, con una demora media de 57 días. La misma demora que tienen los 49 pacientes que esperaban por una intervención el pasado lunes. Recorte que llega porque «al servicio de Cirugía Torácica se le han incrementado tanto los quirófanos de mañana, como de tarde en agosto». La previsión «es que el 70% sean intervenidos entre agosto y la primera semana de septiembre».

Sobre la actividad quirúrgica del servicio, desde la Consejería Salud se indica que a 30 de junio «se hicieron 171 intervenciones, frente a las 168 de junio de 2023». Aunque en aquel momento había 25 pacientes a la espera, frente a los 56 de junio pasado. Insiste en que «la prioridad de la programación» la marca la clínica y «en verano, todos los servicios priorizan sus casos oncológicos». Con todo, los 49 casos de cáncer de pulmón serán operados en ocho semanas. No en cuatro o seis, como dice la guía.