Desmantelado un grupo criminal al que se le imputan 41 robos en bares y comercios

Utilizaban vehículos sustraídos para desplazarse y cometer los robos y en ocasiones llegaron a emplear el método del alunizaje para reventar los escaparates y las entradas de los establecimientos. Se les imputan 41 robos por toda la región. La Guardia Civil de la comandancia de Oviedo ha detenido a diez personas como supuestos responsables de una escalada de robos en bares y comercios del Principado. Dos de los arrestados formaban parte de la conocida como 'banda del Seat León'.

El inicio de esta investigación se remonta a octubre de 2019, cuando la Unidad Orgánica de Policía Judicial de la Guardia Civil de Oviedo detectó un considerable aumento de sustracciones de vehículos y su posible relación con robos en establecimientos públicos. La denominada 'Operación Capigás' ha permitido el esclarecimiento de 41 hechos delictivos, la mayoría robos con fuerza en los concejos de Oviedo, Gijón, Siero, Avilés, Mieres, Lena, Pravia, Las Regueras, Navia y Coaña, así como sustracción de vehículos, daños, delitos contra la seguridad vial y atentado a agentes de la autoridad.

Uno de los episodios delictivos se remonta al 3 de diciembre en la estación de servicio de Cuyences (Oviedo), donde cinco hombres irrumpieron con una maza de madrugada y amenazaron a los clientes y trabajadores para hacerse con la recaudación. Ese mismo día habrían cometido otros tres robos en Oviedo, a los que se desplazaron con un coche robado que fue usado también al día siguiente en el robo de dos bares en Gijón.

Las detenciones tuvieron lugar en junio y julio en Oviedo, Gijón y Avilés. El último de los sospechosos fue arrestado ayer mismo. «Las detenciones resultaron muy laboriosas debido a las medidas de seguridad tomadas por la mayoría de los supuestos autores y el continuo cambio de domicilio que realizaban», señalaron desde la Benemérita.

Los agentes pudieron recuperar varios de los vehículos robados y objetos procedentes de los hechos delictivos, «así como otros efectos incriminatorios y fragmentos de huellas dactilares». El valor de los efectos sustraídos, a falta de peritación oficial se estima en más de 25.000 euros y los daños ocasionados superan los 55.000 euros. La autoridad judicial determinó el ingreso en prisión de los arrestados.