Las empresas turísticas reciben cinco millones para «salvar el año»

Desde que Asturias fue reconocida como destino del año por el 'New York Times' y 'National Geographic' a la paralización al 90%, de los alojamientos de la región por la crisis de la COVID-19 solo han pasado cinco meses. El giro ha sido de 180 grados y la patronal del ramo, Otea, lo dijo ayer sin paños calientes: «Es el peor año turístico de la historia. Desastroso. Ni va a haber 'booms', ni récords, ni grandes ocupaciones», señaló su vicepresidente, Fernando Corral. Todas las grandes expectativas que había puestas en 2020 y que así auguraban las estadísticas se han esfumado. Sin embargo, Gobierno regional, Federación de Concejos y las principales asociacioes del sector se han unido en un grupo de trabajo específico para tratar de paliar los efectos.

Y ya hay un programa en firme. Movilizará ocho millones de euros y, de ellos, cinco serán para apoyar a las empresas turísticas de hasta veinte trabajadores con una línea de microcréditos, que oscilarán entre los 5.000 y 20.000 euros, aunque dicho límite podría verse incrementado más adelante. «Este es un programa vivo», señaló la viceconsejera de Turismo, Graciela Blanco, quien dijo que estará vigente hasta el final de la crisis. 2,8 millones irán destinados a campañas de promoción, que se centrarán en atraer al viajero nacional (del que el sector depende en un 85%) y regional. Se renuncia, de momento, a hacer campaña internacional. Después de haber demostrado un mejor manejo de la crisis, el Principado 'venderá' Asturias como un destino saludable. A la campaña de ' Vuelve al Paraíso', se le sumará otra complementaria, 'Asturias, en clave de bienestar', en la que un grupo de embajadores darán consejos de deporte, naturaleza, gastronomía, cultura..., para ganar calidad de vida.

El sector confía en «librar» la temporada de verano. Agosto, básicamente, ya que para entonces hay mayor certeza de movimientos entre provincias. Lo que tienen claro es que no van a entrar en «guerra de precios» como en Baleares y se venderá «calidad».

Julio Bobes, representante de la mesa de Turismo de Fade, recordó la propuesta de este órgano para diseñar un producto fuera de temporada para «compensar las pérdidas de la primavera». Se trata de packs de dos noches, en los que el Gobierno regional facilitará actividades complementarias de turismo activo, visitas guiadas, wellness y otras relacionadas con la gastronomía. «No es exactamente lo que habíamos propuesto, no queremos campañas de una sola temporada, pero es un gran paso».