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Ó. P.
GIJÓN.
Viernes, 17 de agosto 2018, 03:53
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El control del lobo, el jabalí y las distintas especies animales que comprometen el entorno rural asturiano están estrechamente relacionadas con el notable descenso de la cantidad de cazadores que actúan en el Principado. Así lo sostuvo ayer el viceconsejero de Medio Ambiente, quien considera necesario «un compromiso de partes» para abordar el problema del lobo de manera efectiva. «Faltan cazadores y muchas veces no se les reconoce el papel que desempeñan en el control de las poblaciones», defendió.
Las licencias de caza en Asturias han bajado de 35.000 a unas 10.000 en los últimos 20 años. Todo ello, con el consiguiente envejecimiento del sector. «La cantidad de cazadores mayores de 55 años es superior a la de menores de 35», explicó. De esta forma, el análisis sirvió como crítica a algunos grupos conservacionistas de la región, a los que tachó de «intransigentes» por «no admitir más que sus propios planteamientos».
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