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Los cocineros Félix y Carlos 'dinamizan' a una visitante. DANIEL MORA
Concienciación a todo ritmo

Concienciación a todo ritmo

Cogersa enseña con humor y pide ideas al visitante en favor del medio ambiente

Candela del Valle

Viernes, 17 de agosto 2018, 01:20

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Desde el mediodía de ayer, todos los que se acercaban a pasar el día a la Feria se sorprendían con el ritmo y la energía de dos peculiares cocineros, Félix y Carlos, que recorrían el recinto junto a su carrito de frutas bailando con la música a todo volumen e interrogando a todo aquel que se cruzase en su camino con dos singulares micrófonos hechos con limones. Lanzaban a bocajarro curiosas preguntas sobre el reciclaje: «¿Dónde tirarías un producto con líquido inflamable?», preguntaba Félix. «¡Al punto limpio!», le contestaban los niños. Una paseo y un interrogatorio sin duda singular cuyo motivo fue concienciar a pequeños y adultos sobre la importancia del reciclaje de una forma lúdica y divertida. La actividad, organizada por Cogersa, se enmarcó dentro del programa del Día del Medio Ambiente, en el que tuvo una gran acogida el proyecto creado por el Mercado Artesano y Ecológico de Gijón: El árbol de las ideas.

Desde el mediodía, niños y no tan niños se acercaron a la carpa del exterior del pabellón central para escribir sus ideas sobre cómo mejorar el trato al medio ambiente y cuidar el planeta. «El Árbol de la Vida trata de ser un espacio de reflexión en el que cada uno aporte un pequeño gesto para cuidar la Tierra y nos demos cuenta de que solo tenemos una», explica Elena Fernández, jefa de calidad y desarrollo de Cogersa. Niños, padres y abuelos se acercaban a curiosear y se animaban a dejar su grano de arena en el tendal de las ideas.

Comprar a granel

Pensamientos como los de Alba, que proponía «usar botellas de agua reutilizables». Otros planteaban «comprar las legumbres a granel para ahorrarnos los plásticos». Y además, para incentivar la participación, regalaba una mochila a los más pequeños y tres bolsas de reciclaje a los adultos. El proyecto está además realizándose en otros países simultáneamente para crear así una red mundial de ideas que sea expuesta a nivel europeo.

La tarde concluyó con una gran sorpresa: un mago. A través de sus trucos enseñó a los niños la magia de las 3 R: reducir, reutilizar y reciclar.

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