El Gobierno central impulsa la FP con 80 nuevos títulos y 200.000 plazas más en todo el país

España es el país de la OCDE con un menor porcentaje de alumnos entre los 15 y los 19 años matriculados en Formación Profesional. Solo un 12%, frente a la media de estos países, que es del 25%. Pero es que en Austria, Italia y Suiza se alcanza o supera el 40%. Asturias mantiene el mismo porcentaje que el conjunto del país, pese a que hace años que el número de matriculaciones en FP no deja de incrementarse curso tras curso. Más de 16.000 jóvenes asturianos cursan alguno de los numerosos ciclos que ofrece la región, que cubre más de cien perfiles profesionales. El equipo de la Consejería de Educación se ha marcado como objetivo aumentar el número de estudiantes de FP. Y parece que contará con la ayuda del Gobierno de España.

El Ministerio de Educación ha presentado su I Plan Estratégico de Formación Profesional del Sistema Educativo, un ambicioso proyecto que pretende modernizar estas enseñanzas y adaptarlas a las necesidades del mercado laboral. Los empresarios asturianos lo han dicho en reiteradas ocasiones.

Según un estudio del Foro Educa, el 85% de los empresarios de la región lamenta que el déficit formativo de los jóvenes les obliga a invertir «tiempo y recursos en la formación de sus trabajadores».El presidente de la Federación Asturiana de Empresarios, Belarmino Feito, ya ha advertido en alguna ocasión de que «cada día son más los sectores que tienen problemas para conseguir mano de obra especializada y profesional». Desde Fade reclaman la potenciación de la FP y, en concreto, de la FP Dual.

En esa línea está también el Gobierno central. El Ejecutivo, en sus propias palabras, pretende «mejorar la empleabilidad y satisfacer las necesidades del mercado laboral, así como consolidar la flexibilización de estas enseñanzas, que permiten al alumno una alta cualificación y garantizan una experiencia laboral de calidad que sirve para impulsar un currículo profesional competitivo». Esas palabras se traducen en una lista de acciones concretas y varias cifras importantes.

Para empezar, crecerá la oferta de FP. El Ministerio de Educación ha anunciado que actualizará el catálogo de títulos, diseñando 80 nuevos cursos de especialización, «en especial asociados a la digitalización», y pone ejemplos: Fabricación inteligente, Digitalización del mantenimiento, Ciberseguridad en entornos de Tecnologías de la Información y la Comunicación, Instalación y mantenimiento de redes 5G, Robótica colaborativa y móvil, Robótica y drones, Big data y Análisis de datos.

Además, se actualizarán los contenidos de los 172 títulos existentes en la actualidad, y se hará en colaboración con las empresas y las comunidades autónomas. Y todos los títulos de FP tendrán un nuevo módulo profesional sobre Digitalización aplicada al sector productivo.

Pero es que además se pretende una «flexibilización de la organización de los títulos de FP», con dos decisiones importantes. La primera, la posibilidad de poder estudiar algunos títulos de Formación Profesional a distancia. Y la segunda, la «oferta de títulos con carácter modular 'a la carta' para garantizar el acceso a estas enseñanzas con independencia del territorio donde se resida».

Una de las grandes novedades serán las Aulas Mentor, «oferta formativa no formal para llegar a 3.000 municipios de tamaño pequeño y medio, donde hay menores opciones formativas». Con todo, al previsión es crear, «conjuntamente con las comunidades autónomas, 200.000 nuevas plazas» de FP.

Un sexto eje del plan pasa por el «reconocimiento de competencias básicas y profesionales». El Gobierno estima que haya once millones de personas sin título de formación profesionalizante y sin acreditar su experiencia laboral. Según reflejan los datos del plan, «la mitad de la población activa española cuenta con una formación profesionalizante», es decir, cuenta con titulación de FP de Grado Medio o Grado Superior, estudios universitarios, enseñanzas artísticas y deportivas. Pero la cuestión es que la otra mitad de la población activa del país carece de esa formación «y sería susceptible de participar en la acreditación de competencias de su experiencia laboral».

Hasta ahora, la acreditación de competencias se convocaba por parte de las comunidades autónomas. Pero el ministerio quiere ahora revisar las normativa y convocar también desde el Estado para agilizar los procesos. Además, se creará un procedimiento para acreditar competencias básicas (lingüística, matemática y digital) para 20.000 adultos al año.