«Con premios como este dan ganas de seguir avanzando»

La entrega de los I Premios Agroalimentarios de EL COMERCIO, que tuvo lugar en la tarde de ayer en el Palacio de Congresos, dentro del marco de Agropec 2021, se convirtió en un verdadero homenaje a los sabores del campo asturianos que han sabido transmitir a los consumidores empresas con mucha historia a sus espaldas, pero también jóvenes innovadores que han puesto al servicio de los ciudadanos nuevas formas de llevar a la mesa lo mejor del medio rural de la región. Empresas señeras, como Cafento e Industrias Lácteas Monteverde, se vieron acompañadas ayer por ya firmes realidades a pesar de sus pocos años de andadura, como Astursabor y Los Caserinos.

Fueron las más jóvenes las primeras en recoger sus galardones organizados por EL COMERCIO con la colaboración de la Cámara de Gijón y el patrocinio de Caixabank y Alimerka. Judith Naves (Astursabor) recogió el premio al emprendimiento y mostró su «orgullo» por el reconocimiento y por «ver junto a qué cartel estás, con qué grandes empresas. Esto te pone en el mapa». Pero también se mostró «más orgullosa de la familia porque recoges toda su trayectoria». No pudo ser más explícita al indicar que el premio era «algo brutal».

También las jóvenes Marta Amandi y Alejandra Tomás subieron al escenario para recoger el premio al producto ecológico, que recayó en Los Caserinos. Ambas indicaron que «con premios como este dan ganas de seguir creciendo y avanzando», y se mostraron convencidas de que «la tradición y los productos artesanos tienen que ir de la mano de la innovación y la tecnología. El problema que hay es el relevo generación, pero si un negocio es viable, genera trabajo».

La experiencia vino dada de la mano de Enrique López, director general de Industrias Lácteas Monteverde, que recibió el galardón a la innovación y la internacionalización. Explicó que retomarán ahora aquellos proyectos y contactos en el extranjero que, debido a la pandemia, quedaron parados a pesar de estar ya muy avanzados. También resaltó que este premio supone «una gran motivación para toda la gente que se ha quedado en Grandas de Salime, pero que pone el máximo interés en cualquiera de nuestros proyectos», resaltó López.

El más emotivo de todos los premios fue el de la trayectoria, que recayó en Cafento. Recientemente falleció su alma máter, Carlos Manuel Rodríguez, y la consejera del grupo, Paula Rodríguez Peláez, no pudo evitar las lágrimas al recoger «un premio que va por él». Ante la posibilidad de que la empresa pueda abandonar Tineo, fue tajante: «Cómo nos vamos a ir de Tineo si es nuestra esencia, nos lo ha dado todo. Si no es por Tineo, ¿qué seríamos ahora?», se preguntó.

El problema de conexión a internet que tienen estas empresas en el medio rural fue una constante durante las intervenciones. El consejero Alejandro Calvo aseguró que «es clave. La gran ventaja es que es la infraestructura más fácil de avanzar en menos tiempo. Queremos llegar en dos años al 98% de la población con internet de gran capacidad».

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